Respuesta de Bolsonaro sobre muertos por COVID-19 genera indignación
Brasil tiene más de seis mil muertos y se espera que en los próximos meses llegue a la cima de los contagios por COVID-19.
Rara vez dos palabras provocaron semejante revuelo. El "¿Y qué?" soltado por el presidente Jair Bolsonaro a un periodista que le pedía su opinión sobre el hecho de que el coronavirus hubiera superado entonces los 5.000 muertos en Brasil causó una gran indignación en el país.
La fría respuesta provocó críticas durante toda la semana de gobernadores, dirigentes políticos, profesionales sanitarios y periodistas, indignados por la falta de empatía del presidente.
Bolsonaro está acostumbrado a las polémicas. Pero esta vez sus declaraciones suscitaron estupefacción y furia, porque su país afronta un crecimiento imparable de casos de COVID-19 y se encamina al pico de la epidemia, que podría superar las previsiones más pesimistas.
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Con más de 91.500 casos confirmados, pero según científicos con entre 15 y 20 veces más, Brasil se prepara para afrontar una situación similar a la de Estados Unidos o Italia, en un momento en que la enfermedad ya supera las 6.300 muertes.
"¿Y qué? Lo siento. ¿Qué quiere que haga? Soy Mesías (su segundo nombre), pero no hago milagros", dijo el mandatario derechista el martes por la noche al periodista que le mencionó la cifra de fallecidos en Brasil, que supera a la de China.
Wilson Witzel, el gobernador del estado de Río de Janeiro, una de las zonas más castigadas, criticó a un presidente que "ironiza sobre los muertos" en lugar de "ser un líder en un momento así".
"Póngase a trabajar", dijo Witzel en un tuit dedicado al presidente el miércoles, el mismo día en que el mandatario, un excapitán del ejército y proarmas, se entrenaba en un club de tiro, aparentemente ajeno a la situación de los 210 millones de brasileños.