Decían las abuelas que el <strong>limón y la miel es uno de los mejores remedios contra la tos</strong>. Pero esta vieja creencia hoy va más allá: cultivar limones donde hay abejas, genera frutos de óptima calidad.Hablamos en <strong>Al Campo</strong>, de Caracol Radio, con <strong>Ramiro Cortés</strong>, representante legal de la <strong>Asociación para el Desarrollo Balseño</strong> (<strong>Asodebal</strong>) del <strong>corregimiento La Balsa</strong>, en el <strong>municipio de Buenos Aires</strong>, <strong>departamento del Cauca</strong>, quien dijo que los productores de limón tahití en la zona tenían problemas de productividad, pero implementaron apiarios porque gracias al trabajo de las abejas, los cultivos perduran más tiempo y la polinización es más efectiva.Ahora estás familias campesinas obtienen su sustento de los productos apícolas, además de los limones y otros cultivos. También están haciendo un trabajo de concientizar a otros productores sobre la importancia de las abejas para el ambiente.Conozca detalles sobre el trabajo de las comunidades afro en esta localidad del Cauca, en la entrevista de <strong>Al Campo</strong>, de Caracol Radio, con su vocero, Ramiro Cortés.