En temporada de verano las temperaturas aumentan considerablemente, durante las fechas en las que el calor es insoportable y las personas que tienen que salir de casa para sus trabajos conocen la verdadera tortura que esto significa.

El Sol no da tregua, las personas deben arreglársela para evitar un golpe de calor por lo que recurren a diversas técnicas; sin embargo, la mayoría de ellas solo ayudan en lugares como la oficina o la casa donde se pueden disponer de un amplio espacio y diversos elementos de ventilación para contrarrestar el calor.

Pero para espacios más reducidos como un carro estas alternativas no tienen mucha efectividad, ya que el espacio no permite de la instalación de un complejo sistema de aire acondicionado, por lo que se tiene que valer del que trae integrado y que a veces no es suficiente. Esta situación se vuelve crítica sobre todo para aquellas personas que trabajan como conductores o para aquellos que deben pasar varias horas al interior de un vehículo soportando los altos grados de calor.

Según los expertos, cuando la temperatura del ambiente ronda los 35 °C en el exterior, al interior de un automóvil puede ascender hasta los 55 °C.

Pese a que quizá no se pueda meter un ventilador de gran tamaño, ni mucho menos conectarlo a una fuente de energía, existen otras maneras de mantener el carro fresco en medio de un sol radiante. Una de las alternativas que se puede emplear para aquellos días en los que el calor sea insoportable y deba permanecer mucho tiempo en un vehículo se debe al método que emplean los japoneses para este tipo de situaciones.

De qué se trata este truco

Un maestro de origen japonés reveló el truco para lograr bajar la temperatura al interior de un carro sin necesidad de que esté en marcha y sin necesidad de usar el aire acondicionado.

Para llevarlo a cabo, solo se necesita que se baje la ventanilla del asiento del copiloto, y luego abrir y cerrar de forma rápida y seguida por cinco veces la puerta del conductor. Este procedimiento lograría ayudar a dejar escapar el aire caliente contenido en el carro. Para que los resultados sean aún mejores, también se puede llevar a cabo el mismo procedimiento pero desde la puerta contraria.

Los japoneses hicieron el experimento en varios carros, para probar la veracidad de este método y lograron evidenciar que, en efecto, la temperatura de estos se redujo significativamente. Tal fue el caso que en aquellos vehículos que presentaron una temperatura inicial de 41, 6 °C, luego del aplicar el truco la temperatura se bajó a 33,5 °C.