Cambio de sexo desde los 5 años: la nueva polémica de la Reforma al Código Electoral
Aún no se comienza a discutir el proyecto de ley que pretende reformar el sistema electoral colombiano, y ya cuenta con críticas de distintos sectores.
Colombia
No para la controversia en el mundo político por el proyecto de ley que busca reformar y actualizar el Código Electoral colombiano, aún luego de que el Gobierno nacional decidiera retirarle el mensaje de urgencia, para que se pueda discutir sin afán y con mayor profundidad, artículo por artículo.
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En este caso fue la senadora del Centro Democrático Paloma Valencia quien alertó sobre una nueva polémica. Se trata del artículo 89, que habla sobre la ‘corrección del componente sexo’ en los documentos de identificación y registros civiles. Plantea que se podrá definir como masculino, femenino, transexual, no binario y todos los que eventualmente se vayan a reconocer legal o jurisprudencialmente.
El punto polémico es el parágrafo 2 de este artículo, pues allí se plantea que “podrá tramitarse la corrección del componente sexo de los menores de edad, a partir de los cinco años”. Esto, para la congresista uribista, es “una perla”.
“El Código Electoral trae perlas tan terribles como que a partir de los cinco años a un niño le pueden cambiar el sexo en su identificación. Pero también trae el voto anticipado, el voto electrónico y todo tipo de tecnologías que pretenden dañar todo nuestro sistema electoral”, indicó la senadora.
Además, Valencia aseveró que el proyecto “viene con mermelada. La Registraduría acaba de sacar una resolución para revivir 4.635 puestos, contratistas, y no en época electoral, para que todo el mundo pueda tener puestos en esa Registraduría (...) Lo más grave es que se meten con los niños colombianos”.
Precisamente, y en la antesala de lo que será el primer debate de la iniciativa, el próximo lunes 28 de noviembre a las 2 de la tarde, en la Comisión Primera del Senado, desde el uribismo evalúan presentar una proposición para modificar ese artículo, además de otros cambios y solicitudes para eliminar otros apartados que consideran inconvenientes.
La iniciativa, al ser un proyecto de ley estatutaria, deberá superar cuatro debates en el Congreso y, además, pasar por una revisión de constitucionalidad en la Corte Constitucional, para convertirse en una realidad. Esta reforma, de hecho, ya se había aprobado, pero el alto tribunal lo tumbó por vicios de trámite.