Johnson levantará restricciones en R. Unido y rechaza renunciar por fiestas
A partir del 27 de enero ya no serán obligatorios el uso del tapabocas ni el teletrabajo, que quedan a consideración de los individuos.
El primer ministro británico Boris Johnson se presentó en la Cámara de los Comunes en donde anunció que a partir del 27 de enero serán levantadas la mayoría de restricciones que fueron impuestas por el COVID-19 y particularmente por el aumento de la variante ómicron.
Una de las medidas más importantes es la del uso del tapabocas, que ya no será obligatorio y cuyo uso quedará a discreción de los ciudadanos. También se incluye el teletrabajo y las empresas pueden determinar el regreso a las oficinas.
Johnson dijo que están basado en los más recientes datos científicos que muestran que hubo "un descenso en los niveles de infección" y consideran que la variante ómicron ya llegó a su punto más alto en todo el territorio.
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El dirigente conservador dijo que pasan del plan B al plan A y por eso tampoco serán necesarios los pasaportes sanitarios o de vacunación. Además informó que espera que en un tiempo se reemplacen todos los requisitos legales y ya ni siquiera sea necesario que una persona se aisle cuando tiene gripa.
Las medidas son anunciadas mientras crecen las críticas hacia Johnson por las fiestas que se llevaron a cabo en su oficina en Downing Street durante la curantena. En el Parlamento los opositores buscan apoyo conservador para una moción en su contra. Mientras tanto el ministro rechazó renunciar ante la pregunta de una diputada y dijo que espera conocer el resultado de la investigación que se lleva a cabo.