En el Magdalena el precio del guineo verde está por las nubes
El fenómeno estaría relacionado con la baja producción en las fincas de la Zona Bananera. La fruta empieza a escasear en tiendas y plazas de mercado.
Zona Bananera / Colprensa
Santa Marta
Al igual que la leche y el queso, el guineo verde se convierte en uno de los productos de la canasta familiar del caribe que menos se encuentra en las tiendas de barrio y cadenas de supermercados en el Magdalena, y cuando se logra conseguir algún remanente, su precio está por las nubes.
Jaime Gómez Ospino, concejal del municipio de Zona Bananera región donde se encuentran las 6 asociaciones que agremia las fincas bananeras, ha señalado que la escasez de la fruta es un ciclo normal en el primer semestre de cada año, y aunque las exportaciones están aseguradas, estas disminuyen por la época de verano.
Le puede interesar: Indígenas de la Sierra piden inversión para conservar el Parque Tayrona
“Hemos visto un incremento en el costo del guineo de rechazo, el que consumimos a nivel local. El precio ha sido triplicado en un producto que resolvía cualquier comida de las clases más pobres”, dijo Gómez.
En el listado de precios la unidad de banano aparece en $300 y $350 para los distribuidores, pero para el consumidor final está costando hasta $1.000 pesos. “Anteriormente se conseguía un guineo verde en $60, $80 o $100 pesos como máximo”, señaló el concejal.
Según los productores de la Zona Bananera la fruta que se siembra en esta región del departamento surte las despensas de las grandes cadenas de supermercados del país, lo que también minimiza la cantidad que llega a las tiendas y plazas de mercado.
Le puede interesar: Abren licitación para viaductos del corredor Ciénaga - Barranquilla
“Y el guineo que sale a otros países, además, apetecido por su sabor y textura, está asegurado y bien remunerado por estos días, dado el alto precio del dólar. Sí baja un poquito el número de cajas que se exporta, pero sin afectar los compromisos internacionales”, concluyó el funcionario.
Los magdalenenses esperan que pronto llegue el buen tiempo porque comer ahora ‘cayeye’ o patacón es un majar de dioses, no solo por sus precios sino por lo difícil de conseguirlo.
