¿Lo sabía? Con esta cantidad se debe llenar la copa dependiendo del vino que se sirva

En cada festividad, como Navidad y Año Nuevo, muchas personas deciden brindar o acompañar sus cenas de media noche con una copa de vino, pues además de ser fácil de conseguir, se ha convertido en una tradición en muchos hogares del país y del mundo.

Aunque existen decenas de formas en las que se puede disfrutar este vino, existen algunos factores que pueden cambiar la experiencia que se tiene con este líquido. Uno de estos aspectos es la porción que se sirve en las copas, por esta razón, a continuación explicamos cómo debe servirse según el tipo de vino y algunos otros trucos para ser todo un profesional sirviendo y tomándolo.

¿Cuánto se debe servir según el tipo de vino?

El portal español experto en vino, Vinetur, explica que existe un tipo de ‘estándar’ para servir un vino, dependiendo del tipo de vino que sea. Como sucede con otros alimentos, se han creado ciertas normas que tienen el propósito de mejorar la experiencia que se tiene con este líquido. Estas son:

• Vinos secos (vino tinto o blanco): Normalmente, se suele servir uno 150 ml, es decir, un tercio de la capacidad de la copa de tamaño promedio.
• Jerez: este es un vino de tradición española, especialmente de Andalucía, y su sabor suele ser mucho más fuerte, con un nivel de alcohol mayor (entre el 15 al 22%) que el vino seco. La cantidad de vino que debe servirse en este caso es de aproximadamente 90 ml y usualmente se sirve en una pequeña copita.
• Oporto: estos vinos son mucho más dulces y suelen ser reconocidos como el vino postre. Su porcentaje de alcohol es de alrededor del 20% del alcohol y se suele servir igual que el Jerez, en porciones pequeñas, en copas pequeñas, alrededor de 90 ml.
• Vinos espumosos (champagne y cava): estos se suelen servir igual que los espumosos, es decir, 150 ml, que es la capacidad que tienen usualmente las copas ‘flautas’, usada para servir estos tipos de vinos. Según explica el portal, lo habitual es llenar en dos tiempos la copa de espumoso hasta arriba, aunque nunca debe llenarse completamente.
• Dulces: Algunos de estos vinos son los Sauternes o los Trockenbeerenauslese, y se suelen disfrutar después de la cena, maridados con algo dulce. En este caso, se sirven en botellas pequeñas de 375 ml y se suele servir entre 40 a 90 ml, que es la cantidad estándar para la mayoría de los vinos postre.

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Otros trucos que puede aplicar con el vino

1. Ponga los vinos en la nevera, especialmente si ya lo abrió, pues de esta manera ayudará que se ralentice la oxidación del vino. Los vinos espumosos, se recomienda tenerlos máximo dos días, los blancos y rosados no más de una semana, los tintos pueden durar dos días y los fortificados hasta 28 días bien cerrados.
2. En caso de que no cuente con sacacorchos, puede utilizar un tornillo que sea preferiblemente largo, un destornillador y un martillo. Lo único que debe hacer es atornillar con cuidado el tornillo en el corcho hasta que quede aproximadamente una pulgada a la vista, después tome el martillo y con la parte trasera, intente sacar el tornillo con el corcho.
3. Si se le rompe el corcho y no quiere tener pedazos de este en su vino, puede utilizar un filtro de café para separar estos pequeños trozos del líquido.