Comunidades asentadas en el bosque Guásimo piden diálogo con el Gobierno Nacional
Indican que hubo varias personas lesionadas en los operativos de desalojo y que no han podido regresar a los asentamientos para sacar sus pertenencias.
Pereira
Tras los operativos de desalojo que se realizaron hace unos días en las zonas de influencia del bosque seco tropical Guásimo por parte de Policía y Ejército, las comunidades de los sectores conocidos como Miralindo, La Judea y Nápoles, salieron a la vía que comunica el municipio de La Virginia con el departamento de Caldas, pidiendo ser escuchados por el Gobierno Nacional.
Lo que han indicado las autoridades es que estas personas habrían ingresado desde hace algún tiempo al bosque Guásimo generando daños en el ecosistema y que estos predios, además de ser reserva natural, son propiedad de la Gobernación de Risaralda donde se realizará una parte de la Plataforma Logística del Eje Cafetero por lo que llevaron a cabo dichos operativos de desalojo.
Sin embargo, según explicó Maria Teresa Henao, secretaria general del Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos de Risaralda, esas comunidades, que en su mayoría son indígenas, han pedido en repetidas ocasiones ser escuchadas por las autoridades locales que no han querido dialogar y, por el contrario, los han tildado de invasores.
“Ellos piden es territorio indígena porque son un resguardo. En repetidas ocasiones hemos pedido al alcalde de La Virginia que negocie y él dice que no se reúne con invasores, entonces es difícil. Cuando fueron los habitantes de Nápoles él no quiso escucharlos”, señaló.
Relató también que durante los desalojos muchas personas han salido lastimadas, entre jóvenes, adultos mayores, e incluso, hubo mascotas que perdieron la vida y que el Ejército no les ha permitido el ingreso a las viviendas en los asentamientos donde tienen todas sus pertenencias.
“El Ejército no los deja entrar a recoger los animales, a alimentarlos. Mataron perros, aporrearon un jóven con una aturdidora, gasearon personas de la tercera edad, esta situación es muy grave porque la gente no tiene mercado y lo poco que tenían estaba en sus casas, muchas de ellas las tumbaron con una retroexcavadora”, explicó.
Indicó que las comunidades, tras los intentos fallidos de diálogo con las autoridades locales, piden presencia del Gobierno Nacional para que sea este quien les entregue solución sobre los predios en los que pueden habitar.
Pese a los señalamientos de las autoridades locales y departamentales, estas comunidades dicen ser, en su mayoría, desplazados de varias zonas del país, indígenas, campesinos y personas en proceso de reincorporación.