Ser astronauta es uno de los sueños más comunes de la mayoría de los niños, viajar al espacio y poder apreciar el mundo fuera de este es para muchos, inclusive adultos, uno de sus mayores anhelos. Sin embargo, ser astronautas implica una gran responsabilidad debido a las misiones a las que son asignados. Por lo que desafortunadamente no todas las personas cuentan con las destrezas físicas para convertirse en uno.

Para llegar a una agencia espacial, los astronautas deben pasar por un riguroso entrenamiento tanto físico, mental y de conocimiento. Los humanos pasamos la mayoría de nuestra vida conviviendo con la gravedad y moviéndonos con una fuerza de aceleración de 9,8 metros por segundo al cuadrado, que nos mantiene pegados al suelo. No obstante, los viajes espaciales exigen que los cuerpos se enfrenten a condiciones muy distintas a las que permanece acostumbrado. Ejemplo de esto la falta de gravedad o ingravidez la cual puede alterar la estabilidad de los sentidos.

Cada agencia espacial se encarga de manera muy cuidadosa de que los astronautas cumplan con sus entrenamientos y que además tengan el mejor rendimiento posible, ya que de ello dependerá que sean asignados para las misiones en el espacio. Para la Agencia Espacial Europea (ESA) el entrenamiento cuenta de un entrenamiento básico en el que los astronautas adquieren los primeros conceptos sobre técnicas de submarinismo, algunas materias sobre ciencia y técnicas médicas de primeros auxilios. Así como el estudio de la Estación Espacial Internacional (ISS).

Después de este sigue el entrenamiento avanzado donde se aprende el manejo de los vehículos y experimentos. Al finalizar el entrenamiento avanzado el astronauta ya puede hacer parte de una misión, y para ello se reúne con sus compañeros de con los que debe estudiar a fondo la misión. En cuanto a los requisitos de idioma el inglés es obligatorio, pero además exigen saber otro.

Aunque cada agencia entrene de manera distinta a sus astronautas dependiendo de los requerimientos que necesiten, existen algunos puntos en común entre ellas, como lo es el exigente acondicionamiento físico al que son sometidos sus futuros tripulantes.

¿Preparación física de un astronauta?

Los astronautas deben tener el acondicionamiento necesario que les permita trabajar y desenvolverse en ambientes con microgravedad e ingravidez, para lo cual deben desarrollar sus músculos de manera que el cuerpo se acostumbre a no pesar.

Uno de los ejercicios a los que se deben someter es a vuelos parabólicos fugaces que pueden ir desde los 20 a 25 segundos de gravedad cero. A este se le conoce como Cometa Vómito, por los efectos que puede traer para el tripulante las primeras veces que lo realice, y es que puede experimentar desde mareos, náuseas hasta vómito.

Usualmente, también se deben preparar para mover objetos pesados en baja gravedad para lo cual se entrenan en una pista de metal con poca fricción y rozamiento.

Los astronautas deben pasar horas de inmersión bajo el agua donde desarrollan algunas actividades que simulan los paseos espaciales. Pueden llegar hasta los 12 metros de profundidad soportando la presión que pueden ejercer 22 millones de litros de agua.