Gorgona: El debate sobre si es más importante la seguridad o la vida
La isla que una vez fue cárcel de máxima seguridad y hoy es un paraíso natural, está en el blanco de una discusión sobre la construcción de una base militar que afectaría su flora y fauna
El “gobierno del cambio” como se ha hecho llamar el gobierno de Gustavo Petro está en el centro de un debate ambientalista sobre la construcción de una base militar, financiada por el gobierno de Estados Unidos, en la isla de Gorgona en el Pacífico colombiano.
Más información
Varios sectores ambientalistas le reclaman al Gobierno Nacional sobre las obras que adelanta la Armada Nacional, apoyadas por Oficina Internacional de Asuntos Antinarcóticos y Procuración de Justicia de EE.UU. (INL, por sus siglas en inglés), en el Parque Nacional Natural Gorgona.
Esta isla es considerada por muchos como un tesoro biológico gracias a las distintas formas de vida que alberga. Sin embargo, la reserva natural podría dejar de ser la casa de cientos de especies y pasar de albergar un patrimonio invaluable de flora y fauna para convertirse en una base militar. Dentro de las justificaciones a este proyecto se suma que en la zona se presentan casos de narcotráfico, pesca ilegal y contrabando.
Cuál fue el origen de esta propuesta
El 22 de noviembre de 2014 arribaron en la isla miembros de la extinta guerrilla de las FARC en una operación ofensiva a un grupo de uniformados de la Policía Nacional, el hecho dejó como consecuencia la muerte de un oficial y a otros seis heridos. A raíz de lo sucedido y de otros problemas de orden público, el 3 de diciembre de 2015, la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) expidió de manera irregular el trámite administrativo que permitiría la creación de una base militar al Ministerio de Defensa.
El 31 de diciembre de 2015 la ANLA aprobó bajo la resolución 1730 (Anexo 2 y 3), la licencia ambiental de para el proyecto titulado “Construcción, operación, abandono y restauración de la estación de guardacostas en la Isla Gorgona y obras complementarias”.
El debate ambientalista
El Consejo Nacional Científico asesor del Parque Nacional Natural (PNN) de Gorgona fue de las primeras entidades en denunciar la irregularidad con la que se había otorgado la licencia ambiental por parte de la ANLA. En noviembre de 2016, el Comité Científico envió una carta a la entonces directora de Parques Nacionales Naturales, Julia Miranda y al gobierno de turno para que se cuestionara la rigurosidad con la que se había procedido. Adicionalmente, presentaron sus preocupaciones sobre el desarrollo de estas obras en la reserva natural a las que se sumó la Academia Colombiana de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales.
Durante este año el entonces presidente, Juan Manuel Santos, defendió este proyecto afirmando que contribuía a la seguridad nacional y servía para contrarrestar las actividades ilegales. Mientras que, por su parte la Armada Nacional se encargó de socializar el proyecto en dos ocasiones, la primera en el 2016 y la segunda en el 2021.
Dentro de estas reuniones la comunidad científica pudo hacer algunas recomendaciones sobre las obras para reducir al mínimo sus impactos. No obstante muchos otros estudios no fueron socializados ante el Comité Científico por lo que se teme que puedan afectar al ecosistema.
El PNN de Gorgona hace parte de la Lista Verde de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) que protege a 62 áreas naturales en el mundo. El tesoro natural que está en riesgo se relaciona con los ecosistemas terrestres y marítimos, entre los que se destacan 78 especies de coral, de las cuales casi 18 de ellas son únicas de la zona.
En el fuerte debate sobre la viabilidad de las construcciones se ven involucrados distintas personalidades, desde líderes sociales locales, la comunidad científica, hasta las altas figuras políticas y militares.
¿Seguridad “nacional” sobre Justicia ambiental?
El PNN de Gorgona ya habría sido testigo de frialdad de la acción humana cuando en los años 60 se construyó la cárcel de máxima seguridad a la que eran enviados los criminales más buscados del país. El Alcatraz colombiano, como se conoció a este reclusorio habría servido como un centro de tortura y violación a los derechos humanos, hasta 1983, año en el que se clausuró.
Gorgona pasó de ser la cárcel más temida a un paraíso natural de origen volcánico. La zona cuenta con 60.000 hectáreas de selva húmeda tropical y diversas especies endémicas. El PNN se ha convertido en un destino turístico bastante apetecido; sin embargo, varios visitantes se lamentan sobre las dificultades para llegar debido a la falta de un muelle.
Dentro de los planes para construir la base militar estaría incluida también la construcción de un muelle de 170 metros. El jefe de parques naturales en Gorgona, Daniel Agudelo, comentó en entrevista con AFP que cerca de 6.400 turistas visitaban la isla cada año y debían desembarcar con dificultad por no tener un muelle, por lo que consideró al proyecto como “factible”.
Otros componentes que estarían dentro de esta licitación contempla la construcción de: Una estación de guardacostas de tercer nivel (que incluye un bloque administrativo, un bloque de alojamiento para infantería y oficiales, así como un bloque de cocina y comedor). Un tanque de almacenamiento de 5.000 galones de combustible. Una torre de comunicación con un radar en el Cerro La Trinidad.
Hasta el momento ya se lleva construida la torre para el radar, la cual muestra los primeros signos de deterioro ambiental por el constante tráfico para el transporte de materiales, según lo expresó el Comité Científico. Esta misma entidad alertó el inicio de la construcción del muelle a partir del 10 de enero del 2023.
Comité Científico del Parque Nacional Natural Gorgona envió una carta al presidente Gustavo Petro, donde alerta sobre los efectos negativos en el medio ambiente una vez se comiencen las obras para levantar la base militar. En el mismo documento el Comité Científico alerta sobre la aparición de algunas zonas de acceso exclusivo militar, lo cual ha restringido el paso “tanto al personal del Parque como a investigadores, argumentando problemas de seguridad nacional en un espacio destinado para la conservación y apreciación de la naturaleza”.
Los políticos toman partido
Al parecer la discusión real es entre si pesa más la seguridad nacional o la justicia ambiental, y este al litigio se suma el exsenador Jorge Enrique Robledo quien se muestra a favor a la causa verde y defiende a esta última. Robledo aseguró en su columna de opinión para el medio Confidencial Colombia, que es una vergüenza ante el mundo civilizado que se haya dado la licencia ambiental a una construcción de este tipo en una reserva natural invaluable como Gorgona.
Adicionalmente, el exsenador comparte la opinión de muchos que cuestionan que el gobierno haya actuado con autonomía y no bajo la influencia de Estados Unidos. Robledo explicó que el PNN de Gordona quedaría bajo el control de la Armada Nacional y el Ministerio de Defensa quienes ningún interés tienen en el cuidado ambiental.
Las preocupaciones crecen teniendo en cuenta que sería el Ministerio de Defensa el que se haga cargo de Gorgona y a esta se añade la visita de la jefe del Comando Sur de EE.UU., Laura J. Richardson, en septiembre de 2022, donde buscaba ampliar las cooperaciones militares entre Bogotá y Washington. Durante la visita de Richardson, las Fuerzas Armadas estadounidenses obtuvieron el permiso para desplegar unidades en la Amazonía colombiana, bajo la idea de controlar la desforestación.
Varios sectores de la opinión pública cuestionaron que la verdadera intención de esta incursión sea por una causa ambientalista y no por los intereses que tiene EE.UU. sobre el control militar. Precisamente esta incertidumbre se relaciona con la base militar que el INL financia en Gorgona, ya que la isla se encuentra en uno de los puntos estratégicos para la comunicación interoceánica.
No obstante pese a que la contienda entre ambientalistas y militares se hace más álgida, lo cierto es que el futuro de Gorgona reposa en las manos del presidente Gustavo Petro, quien finalmente decidirá sobre el avance de las construcciones.
Sin embargo, la vicepresidente, Francia Márquez aseguró que apoyará a las comunidades que rechazan la construcción del muelle. Asimismo, también afirmó en un discurso hecho desde el municipio de Guapi, en el departamento de Cauca, que: “El desarrollo no puede ser a costa de la vida de la gente, de la naturaleza, y del bienestar. El desarrollo es con la gente, es con la naturaleza o no será”.