La inflación en EE.UU. en mayo llegó a la cifra más alta en 40 años
Tanto economistas de Wall Street como propietarios de pequeñas empresas temen una posible recesión el próximo año.
La inflación en Estados Unidos llegó a la cifra más alta desde 1981, debido a que en mayo subió un 8,6 por ciento, en comparación con el año anterior, y se mantiene en el nivel más alto de los últimos 40 años.
Según la última estimación de la Oficina de Estadísticas Laborales, los precios subieron un 1% en comparación con el mes anterior, un rápido ritmo de inflación que hace cada vez más difícil para los consumidores pagar las compras diarias y pone bajo presión a la Reserva Federal y la Casa Blanca.
El aumento en los precios de la gasolina se ha convertido en la forma más directa de los estadounidenses de sentir la inflación, teniendo en cuenta que el promedio nacional por galón de gasolina se acercó a los $5 y se ha vuelto común gastar hasta 100 dólares para llenar un tanque de gasolina.
Tanto los economistas de Wall Street, como los propietarios de pequeñas empresas, se preocupan cada vez más de que sea posible una recesión el próximo año.
Los problemas de la cadena de producción y la logística de distribución vinculados a la pandemia continúan pronunciados, lo que hace que productos esenciales escaseen. La guerra en Ucrania está elevando los precios de los alimentos y los combustibles.
A esto se suma que la demanda de los consumidores sigue siendo impulsada en parte por los ahorros acumulados durante la pandemia y el aumento de salarios, sin embargo, podrían no compensar con los precios de la inflación.
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Aunque los legisladores han dejado claro que ayudar a que la inflación regrese a un ritmo más sostenible es su máxima prioridad, hacerlo recae principalmente en la Reserva Federal.
Recientemente la Secretaría del Tesoro, Janet Yellen, dijo que su evaluación del año pasado de que la inflación representaba una amenaza a corto plazo durante la pandemia era "errónea", pero desestimó que el país vaya a sufrir una recesión.