Los compromisos del G7 con el clima, la pandemia y la economía
Al finalizar la conferencia de las 7 potencias, se dejaron en firme una serie de compromisos para la próxima década.
El Primer Ministro Boris Johnson (C) saluda al Presidente del Consejo Europeo Charles Michel (L) y a la Presidenta de la Comisión Europea Ursula von der Leyen(Getty Images)
En la clausura de la cumbre del G7, sus líderes se comprometieron a ayudar al mundo a enfrentar efectivamente la pandemia del coronavirus, frenar el cambio climático y atajar los desafíos que supone China y Rusia para todo el mundo.
Luego del primer encuentro cara a cara en casi dos años, los jefes de Estado de Estados Unido, Canadá, Alemania, Francia, Italia, Japón y Reino Unido expresaron una ambiciosa agenda para los próximos años, aunque no se anunciaron medidas concretas.
Cambio climático
El compromiso central del G7 en este punto es que, hacia 2030, se debe haber protegido efectivamente el 30% de la tierra y los océanos, frenando la pérdida de biodiversidad y reduciendo sus emisiones de carbono a la mitad respecto a 2010.
Pese al anuncio, ecologistas como el director de Greenpeace en Reino Unido, John Sauven, criticaron las promesas insuficientes resaltando que "sin un acuerdo para poner fin a todos los nuevos proyectos de combustibles fósiles -algo que debe hacerse este año si queremos limitar el peligroso aumento de la temperatura global- este plan se queda muy corto”.
Coronavirus y vacunación
El principal anuncio sobre la pandemia fue el ofrecimiento de mil millones de vacunas contra el coronavirus a nivel global, especialmente a los países más desfavorecidos. A su vez se firmó una declaración para empezar a trabajar en prevenir futuras crisis sanitarias.
Pese al anuncio, se recordó que el estimado de vacunas necesarias para frenar la pandemia son 11.000 millones de vacunas por lo que, nuevamente, se consideró que el ofrecimiento del G7 es insuficiente.
Economía global
El efecto de la pandemia no solo es sanitario y por ello la directora del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, resaltó la necesidad de ayudar a los países en vía de desarrollo a remontar la crisis financiera provocada por la pandemia.
Ante este llamado, el G7 anunció un plan de infraestructuras llamado “reconstruir un mundo mejor” para ayudar a “los países de renta baja y media” incluyendo principalmente a Latinoamérica con recursos estimados en “cientos de miles de millones de dólares”.
El anuncio del plan de ayuda económica no es extraño dado que busca hacerle frente al proyecto anunciado por China denominado “nuevas rutas de la seda” con el que se busca un apoyo similar a los países afectados por la pandemia.
Amenaza china y rusa
En su declaración conjunta, el G7 pidió a Rusia poner fin a las actividades desestabilizadoras que han resultado en “injerencia en los sistemas democráticos de otros países”.
A su vez se pidió a China “respetar los derechos humanos”, especialmente en las regiones de Hong Kong y Xinjiang, donde se han reprimido a manifestantes, defensores de derechos humanos y minorías musulmanas.
En el documento se insta a Moscú y a Pekín a cumplir sus obligaciones internacionales en cuanto a derechos humanos, esto refiriéndose a las investigaciones sobre uso de armas químicas y represión a medios de comunicación y protestantes de la comunidad civil y oposición política.
