Los cinco momentos de la jornada en Davos

1. El "genio" Tusk y la "simpática" Von der Leyen 

En su último día en Davos, el presidente de Estados Unidos no tuvo reparos en dar su opinión sobre personalidades y empresarios.

"Jean-Claude [Juncker, el expresidente de la Comisión Europea] era amigo mío pero francamente era imposible ponerse de acuerdo con él", dijo Trump, al tiempo que aseguró que su sucesora, Ursula von der Leyen, es "muy simpática".

En Davos el presidente estadounidense se reunió con directivos de grandes empresas (Volkswagen, Saudi Aramco, Sony, Barclays, Apple, Microsoft...) pero su preferido es Elon Musk, el responsable de Tesla conocido por sus excentricidades, "uno de nuestros grandes genios", aseguró.

2. Apoyo real al clima 

"¿De qué sirve toda la riqueza del mundo obtenida de los negocios como de costumbre si no se puede hacer nada con ella, excepto verla arder en condiciones catastróficas?", dijo el príncipe Carlos en una intervención en el Foro Económico Mundial (WEF).

Tras su discurso Charles, que vino hasta la estación de esquí suiza en un Jaguar eléctrico, se entrevistó en privado con Greta Thunberg, la activista climática de 17 años.

Trump dijo por su parte que le "habría encantado" conocerla pero que, según él, hay otros países que contaminan mucho más que Estados Unidos por lo que "Greta tendría que centrarse en esos lugares".

3. Fuego, electricidad e inteligencia artificial 

El presidente de Alphabet (Google), Sundar Pichai, dijo el miércoles que la inteligencia artificial era para la humanidad un cambio "más profundo que el fuego y la electricidad".

Por su parte Ren Zhengfei, el fundador de Huawei, el gigante tecnológico chino, la comparó con las armas nucleares.

"Nací cuando la bomba atómica estalló en Japón. Cuando tenía seis años, lo que más temía la gente era la bomba atómica. Pero si miramos al pasado vemos los grandes beneficios de la energía atómica. Y la inteligencia artificial no hizo tanto daño como la bomba atómica".

4. "Criminales" climáticos 

Para muchas oenegés que están en Davos, el cambio climático es su mayor preocupación.

"En cada charla que tengo aquí intento que estalle la verdad [sobre el clima] ante los poderosos, intento enfrentar a los hechos a gente que no están acostumbrados a ello. Es incómodo: es como una zona de guerra medioambimental o una escena de crimen donde tuvieras a todos los criminales delante", dijo a la AFP, Jennifer Morgan, responsable de Greenpeace.

5. Ucrania, país sin amor 

El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, acude por primera a Davos buscando inversiones y... amor.

"Ucrania, un lugar donde los milagros se convierten en realidad, tenía que venir a La Meca de las inversiones", dijo, comparando su país con las start-up tecnológicas.

"Hoy somos un país al que nos faltan inversiones ¡y también amor!".

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