Alexander Nieves, el ingeniero detrás del dispositivo que salva a ciclistas en las vías

Los accidentes viales son una de las problemáticas que año tras año está en el radar de las autoridades competentes y, sin duda, los ciclistas son unos de los más vulnerables. A pesar del creciente interés por la movilidad sostenible y el uso de la bicicleta como medio de transporte alternativo, las vías del país aún no ofrecen las condiciones de seguridad necesarias para este grupo.

Los ciclistas se enfrentan a diario a una serie de riesgos, como el exceso de velocidad de los vehículos motorizados, la falta de infraestructura adecuada, la invasión de ciclorrutas y la poca conciencia ciudadana sobre la importancia de compartir la vía. Sin embargo, gracias a varias acciones, como las realizadas por la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV). Acorte de noviembre de 2024 se han salvado 167 vidas de motociclistas, 6 de usuarios de vehículo y 35 ciclistas.

Pero estas no son las únicas estrategias que funcionan, pues el ingenio parece no tener fin y de eso sí que sabe Alexander Nieves, creador de una compañía que se enfoca en “salvar vidas en la vía”, luego de que sufriera un accidente como biciusuario.

De un accidente a inspiración para salvar vidas

Un trágico accidente en noviembre de 2018 marcó un antes y un después en la vida de Alexander Nieves. Arrollado por una buseta mientras pedaleaba, este ingeniero mecatrónico encontró en esa experiencia el impulso para crear una solución que transformara la seguridad vial. La explicación del conductor, quien alegó no haber visto al ciclista, encendió en Alexander una llama de innovación.

Así nació BIGO (@bigo_safe), un dispositivo inteligente diseñado para hacer más visibles a los ciclistas en las vías. Este sistema se compone de un sensor ubicado en el casco que detecta los movimientos de la cabeza del usuario. Al identificar una inclinación, activa de forma automática un conjunto de luces LED adheridas a la parte trasera de la prenda o de la bicicleta, señalizando con claridad la intención de girar o frenar.

Lo que comenzó como un prototipo, hoy es una realidad patentada que ha trascendido las bicicletas, pues motociclistas y usuarios de patinetas eléctricas también han encontrado en esta herramienta un aliado para aumentar su visibilidad y reducir el riesgo de accidentes.

“Lidero actualmente un equipo de más de 9 años acá en Colombia y tenemos presencia en otros países como Nueva Zelanda, Australia, Canadá y México. Estamos trabajando y queremos seguir salvando vidas en el mundo”, afirmó. Actualmente, tienen 2.000 clientes y 4.700 usuarios en todo el mundo.

Alexander tiene una visión ambiciosa: llegar a todos los rincones del país, especialmente a las escuelas. Su sueño es equipar a los niños que se desplazan en bicicleta con este dispositivo, garantizando así su seguridad en las vías. “Mi meta es que BIGO llegue de manera gratuita a todos los niños que usan la bicicleta para ir al colegio”, afirma el inventor en la página web oficial de su creación.

Reconocimientos

Luego de ganar reconocimiento por ser finalista en un concurso de ideas auspiciado por el canal History Channel, en 2020 ganó el concurso de liderazgo colombiano Titanes Caracol, en la categoría de Tecnología e Innovación; en 2022 fue finalista de los Premios Mundiales de WIPO (World Intellectual Property Organization) y en 2023 fue reconocido por la universidad estadounidense MIT como uno de los 35 innovadores latinoamericanos menores de 35 años.