A dos años del gobierno Petro, ¿Es posible un acuerdo nacional?
Panelistas analizaron las posibilidades de lograr acuerdos en medio del panorama político que vive el país y las propuestas de acuerdo nacional del Presidente.
A dos años del gobierno Petro, ¿es posible un acuerdo nacional?
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Gustavo Petro | Foto: GettyImages
Panelistas analizaron las posibilidades de lograr acuerdos en medio del panorama político que vive el país y las propuestas de acuerdo nacional del Presidente.
En Hora20 una mirada a los temas que no alcanzamos a analizar a fondo durante la semana. El análisis a los dos años del presidente Petro en el poder, de su discurso el pasado 7 de agosto y de un nuevo llamado a un acuerdo nacional. El análisis a una propuesta que parece haber nacido muerta, la de revivir la reelección presidencial.
Lo que dicen los panelistas
Lariza Pizano, periodista y columnista en El Espectador, señaló que después del 20 de julio el Presidente está teniendo cambio de tono en alocuciones, “a pesar de que sigue hablando de reformas sociales, está siendo menos confrontacional con sectores con los cuales había sesgos comunicacionales”. Resaltó que el cambio de tono tiene que ver con la convocatoria de acuerdo nacional, por un lado, y por la mejora de la comunicación con sectores que tradicionalmente se consideraban en contraposición al Gobierno. Además, planteó que se renueva su discurso en la implementación de acuerdo de paz y plan de choque, “por primera vez siento que el Presidente asume abiertamente cuáles son los retos y dificultades de su Gobierno en materia de corrupción, cambios de gabinete y ejecución”.
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Luis Guillermo Vélez, abogado, exsecretario general de la presidencia y exviceministro de Defensa, destacó que el discurso de 20 de julio y 7 de agosto son parecidos a los del año pasado, “él suele tener un tono más moderado en esas celebraciones patrias, pero se le suelta la cadena cuando sale a las provincias y polariza”. Resaltó que el año legislativo concluyó con el Presidente hablando todavía de constituyente, poder popular y ‘fast track’, “veo con escepticismo este nuevo tono del Presidente, ya veremos cuánto le dura la moderación”.
Por otro lado, dijo que el Presidente habla de concertación, llama a acuerdo nacional y después al Presidente no le gustan las concertaciones y las entierra como ocurrió recientemente con reforma educativa, “este Gobierno sufre de un caso agudo de adanismo, piensa que todo se crea a partir del 7 de agosto del 2022 y que todo ha sido resultado de su gestión o falta de gestión. Colombia viene en progreso importante en los últimos 30 años”.
Para Alejandro Ocampo, representante a la Cámara por el Pacto Histórico, el Presidente tiene una muestra de humildad y sensatez, “ojalá todos los gobernantes hubiesen alguna vez admitido que en su gobierno hay corrupción”, además, manifestó que los gobernantes cuando nombran una persona que comete corrupción, el camino que deberían seguir es el de Gustavo Petro, “es bello lo que hace, decir que él lo nombró y pedir perdón”. Frente a un acuerdo nacional, dijo que por más diferencias que tengan los partidos políticos, deben tener la posibilidad de que algunos puntos en común se hagan en conjunto, pues está seguro que las Reformas del Gobierno son más que necesarias.
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Agregó que se necesita, fuera de orillas ideológicas y pensamientos vanguardistas, pensar en la salud de los colombianos, en lo que les favorece, “luego nos agarramos políticamente, pero el bien del país requiere que baje la pobreza, mayor educación y mejor salud. Eso debe estar por encima de cualquier bandera política”.
Juan Daniel Oviedo, excandidato a la alcaldía de Bogotá, concejal de Bogotá, exdirector del DANE, resaltó la posición del Presidente es pragmática, “en tiempos de normalidad, el dato de pobreza monetaria se presenta a finales de abril y el de este año se publicó en julio, cuatro días antes de un discurso importante como es el del 20 de julio ante el Congreso”. También dijo que hay oportunismo estratégico porque en los discursos del 20 de julio y 7 agosto el Presidente dice que es él quien sacó a 1,6 millones de colombianos de la pobreza porque subió el salario mínimo el 12% y bajó el precio de los alimentos, “vemos un discurso ideologizado y populista con falsa causalidad. Como analista económico ha sido muy difícil ver al Presidente decir abiertamente en medios internacionales que fueron sus medidas las que redujeron la pobreza cuando en realidad ha sido el empleo que genera el sector privado”.