A horas de iniciar el partido de ida de la final entre Atlético Bucaramanga e Independiente Santa Fe, el equipo de la capital expresa su manera de salir a la cancha y el deseo de dejar ocho años de sequía atrás para levantar el décimo título de liga. En conferencia de prensa, el técnico Pablo Peirano y el capitán Hugo Rodallega hablaron de lo que será este primer partido en la territorio santandereano.

“Sabemos que enfrentaremos una defensa fuerte y organizada. No vamos a cambiar ni modificar las formas de ataque, sino que vamos a buscar en ciertos espacios y con movimientos hacerle daño al equipo rival”, expresó el técnico uruguayo que afronta su primera final en Colombia como técnico en propiedad.

Ímpetu y deseo de triunfar

Desde su regreso a Colombia, jugando para Santa Fe, Rodallega se ha consolidado como referente del equipo, buscando satisfacer el hambre de gloria y triunfo que lleva por dentro, al igual que sus compañeros. “Esto lo vivo con mucha pasión, ilusión y por supuesto lo disfruto. Quería ser protagonista, tener un equipo que pelee finales como lo hemos hecho en Santa Fe y por supuesto representando este equipo que tiene mucha historia y merece seguir cosechando títulos”, reveló el jugador.

Por su parte, Peirano expresó la sensación de felicidad y ánimo al llegar a una final, luego de haber tomado el cargo en octubre de 2023. “Estamos muy contentos y concentrados. Sabemos la responsabilidad que tenemos, que nos agarra en un buen momento. Estamos muy bien en todos los aspectos para competir con un rival que nos agarra en el momento más alto de rendimiento”, agregó.

A por la victoria

Santa Fe enfrentará un rival de categoría como lo ha sido Bucaramanga, que logró una campaña histórica en el todos contra todos y se metió en la final en el último partido de cuadrangulares. Su instinto goleador y las herramientas individuales y grupales lo llenan de optimismo para pelear como un guerrero, el que podría ser el partido más importante de su carrera en años.

“Vamos a pelear de tú a tú. Será un partido complicado, una serie complicada. Se quedará con el título el que se equivoque menos y haga las cosas mejor. Respetamos su deseo de querer tener la primera estrella, pero nosotros iremos a muerte para poner la 10 de Santa Fe”, sentenció.

“Bucaramanga tiene una defensa sólida que se ha mostrado fuerte dentro del campeonato, sin embargo, si uno quiere ganar y ser campeón hay que ganarle al que se ponga al frente. Vamos a buscar los movimientos y estrategias para intentar hacerles daño, así como me imagino ellos lo esperan hacer con nosotros. Será un partido bastante entretenido”, sostuvo.

Valorando al rival

Desde su llegada al banquillo del equipo cardenal, Peirano le devolvió al club el instinto de garra y lucha que caracterizó al conjunto rojo en sus mejores años. Con una identidad marcada por la fortaleza y el rigor al jugar cada partido, el uruguayo expresó algo que puede ser un tipo de mentalidad, transformado en una forma de vida.

“No tenemos alguna mentalidad para el local o el visitante, o ya sea terminando en casa o fuera, no pensamos de esa manera. Cada partido es un nuevo duelo y una hoja en blanco que hay que escribirla y si no fuera por esa mentalidad tampoco estaríamos en esta instancia. Los puntos siempre van a sumar de a tres, y para conseguirlos, tenemos que hacerlo de local o de visitante”, apuntó.

Finalmente, el entrenador de 49 años elogió el trabajo de Rafael Dudamel y compañía, ponderando lo que ha sido una campaña llena de altas y bajas, que hoy los tiene al borde de su primer título.

“Bucaramanga es el equipo más sólido, el que más competía, no solamente de local sino de visita. Venía con ese perfil y por eso terminó con ese mismo puntaje. En partidos importantes logró el resultado, de lo cual siempre fue un equipo que iba a estar al frente y nunca lo dimos por descartado. Es una instancia nueva, es una instancia distinta, hay que vivirlo diferente a lo que es un partido normal. No es el cuadrangular, sino otra cosa, así que estamos los dos muy preparados para esto”, concluyó.