El rover Perseverance, que llegó a Marte en el 2021, se ha convertido en una de las herramientas más ambiciosas para la exploración interplanetaria que ha empleado la NASA, y, de igual manera, sus resultados han sido sorprendentes, puesto que le ha permitido a la humanidad ver y escuchar lo que ocurre en el planeta rojo, a 225 millones de kilómetros.

Desde rocas con formas particulares y paisajes desérticos, hasta antiguos cuerpos de agua que podrían ser la clave en la búsqueda de formas de vida, los resultados que ha enviado Perseverance a la Tierra durante su estancia marciana han resultado sorprendentes y, sin duda, constituyen una fase inicial de un promisorio futuro para la ciencia espacial.

Los remolinos marcianos

En esta ocasión, Perseverance sorprendió a los científicos mostrando la parte inferior de un remolino de polvo marciano, en imágenes captadas en movimiento, a lo largo del borde occidental del cráter Jezero. El vídeo, acelerado 20 veces por la agencia, está compuesto por 21 fotogramas tomados con cuatro segundos de intervalo por una de las Navcams del rover.

Estos remolinos son mucho más débiles y generalmente más pequeños que los tornados que se producen en la Tierra, son uno de los mecanismos que mueven y redistribuyen el polvo alrededor de Marte. Los científicos los estudian para comprender mejor la atmósfera marciana y mejorar sus modelos meteorológicos.

De acuerdo a los datos de las imágenes, los científicos de la misión determinaron que este remolino de polvo en particular se encontraba a unos 4 kilómetros de distancia, en un lugar apodado ‘Thorofare Ridge’, moviéndose de este a oeste a unos 19 km/h.

Según explica la agencia, calcularon que el ancho del remolino era de unos 60 metros. Y aunque en el encuadre de la cámara solo se ven sus 118 metros inferiores, los científicos también estimaron la altura total del fenómeno.

“No vemos la parte superior del remolino de polvo, pero la sombra que proyecta nos da una buena indicación de su altura”, explica Mark Lemmon, científico planetario del Instituto de Ciencias Espaciales de Boulder (Colorado) y miembro del equipo científico del Perseverance.

“La mayoría son columnas verticales. Si este remolino de polvo estuviera configurado así, su sombra indicaría que tiene unos 2 kilómetros de altura”, aseguró el científico en un comunicado.

Los remolinos de polvo también existen en la Tierra y se forman cuando las partículas ascendentes de aire caliente se mezclan con columnas descendentes de aire más frío. Las versiones marcianas pueden crecer mucho más que las terrestres.

Aunque son más prominentes durante los meses de primavera y verano (el hemisferio norte de Marte, donde se encuentra Perseverance, se encuentra en verano), los científicos no pueden predecir cuándo aparecerán en un lugar específico.

Por ello, Perseverance y su compañero Curiosity, el explorador de Marte de la NASA, vigilan rutinariamente en todas las direcciones en su busca, tomando imágenes en blanco y negro para reducir el peso de los datos enviados.

La misión de Perseverance

La astrobiología y la búsqueda de indicios de vida microbiana antigua (se presume que Marte tuvo vida en algún momento de su desarrollo) son los objetivos fundamentales de Perseverance, pero no son las únicas actividades científicas que está preparado para realizar el vehículo robotizado.

El rover se encargará también de caracterizar la geología y el clima del planeta en el pasado, buscando preparar el camino para la exploración humana de este planeta. Será la primera misión en recoger y almacenar roca y regolito (roca y polvo rotos) marcianos.

Se espera que las próximas misiones de la NASA, en las cuales cooperará con la ESA (Agencia Espacial Europea), impliquen el envío de naves espaciales que puedan recobrar las muestras de Perseverance y enviarlas de regreso a la Tierra para su análisis a fondo.

Estas son las imágenes recopiladas por Perseverance de un remolino de polvo en Marte: