¿Ahora las empresas deberán dar alimentación a los trabajadores y sus hijos?

Ante la Cámara de Representantes se radicó un proyecto de ley que busca crear un beneficio de alimentación para el trabajador, con el fin de mejorar las condiciones nutricionales, fortalecer la salud, prevenir enfermedades, aumentar la productividad y reducir el ausentismo laboral.

Los trabajadores que ganan hasta dos salarios mínimos mensuales legales vigentes, es decir, $ 2′320.000, podrían acceder al beneficio.

El proyecto deberá ser aprobado en el Congreso y según la bancada del Pacto Histórico tiene la intención a ofrecer alimentación gratuita a los empleados en su horario laboral.

Los representantes que impulsan el proyecto aseguran que este mejoraría las condiciones nutricionales, además de prevenir enfermedades y aumentaría la productividad. “Dado que los trabajadores a veces no tienen tiempo o lugar para comer, ni dinero suficiente para comprar alimentos, un gran número de trabajadores no consumen suficientes calorías o alimentos nutritivos para rendir de manera óptima en el trabajo”.

De acuerdo con los congresistas, el beneficio podrá otorgarse por medio de instalación de comedores o casinos, uso de restaurantes en el lugar de trabajo o en sus inmediaciones y entrega mensual de un bono de alimentación a través de vales, cupones o tarjetas electrónicas.

¿Por qué genera polémica el proyecto que busca alimentación para los trabajadores?

El proyecto no deja ser polémico, pues hay sectores que señalan que económicamente hablando es inviable.

Camilo Cuervo, director ejecutivo del Colegio de Abogados del Trabajo de Colombia, advirtió en 6AM que el proyecto sería la estocada final para las pequeñas empresas.

“Es una estocada a los pequeños empresarios y a las microempresas porque se plantea que todos los empresarios deben suministrar a sus trabajadores un beneficio de alimentación, que si no lo pueden dar físicamente tendrían que pagarlo y eso podría traducirse en un pago que puede oscilar entre los $150.000 y $300.000 mensuales, que si usted hace cuentas, eso incrementaría el valor del sueldo más o menos entre un 15 y un 20% mensualmente”, asegura el abogado.

Y además cuestiona, “si hoy tenemos tantos problemas con la formalización, imagínese lo que puede significar que el empleador ahora tenga que alimentar a los trabajadores. Hay empresas de grandes tamaños de grandes volúmenes y con necesidades que eventualmente se dan alimentación a sus trabajadores, pero obligar a las empresas y a todos los empleadores a suministrar alimentación puede ser muy peligroso para la generación de empleo y para la formalización de empleo en el país”.

El abogado reconoce que aunque el propósito del proyecto es bueno, el subsidio es contra un tercero, “es peligroso porque económicamente podría ser un problema para el 89% de las empresas colombianas que son mipymes. El Gobierno pareciera que insiste en poner como enemigo al empleador”.

Para más información escuche la entrevista completa.