A último debate reforma al Código Electoral: así están los tiempos para que no se hunda
Este proyecto, que actualiza el Código actual, vigente desde 1986, deberá surtir su último debate antes del 20 de junio para poder convertirse en ley.
Registraduría Nacional del Estado Civil-Cortesía
Congreso
Tras dos días seguidos de discusión, la Comisión Primera de la Cámara de Representantes aprobó en tercer debate el proyecto de ley estatutaria que pretende reformar y actualizar al Código Electoral colombiano, con una votación casi unánime: 31 congresistas a favor y uno en contra.
“Se regula todo lo que tiene que ver con las elecciones, las funciones de las autoridades electorales, la fidelidad electoral, y se aplican a todos los procesos electorales en Colombia”, comenzó explicando el representante del Pacto Histórico Alirio Uribe.
De acuerdo con el congresista, este proyecto de más de 280 artículos “le da mucha más fuerza al Consejo Nacional Electoral, sobre la Registraduría; digamos que hay un equilibrio de poderes. También es muy importante todo el tema de los softwares, que sea estatal y que pueda ser auditado por los partidos. Se garantiza la paridad de género en todo el tema de las listas, se depura el censo electoral, se controla el trasteo de votos, todo el tema de control electoral. Se fortalecen la inspección y las listas de candidatos por firmas”.
Por ello, el congresista lo calificó como ‘un gran avance’, destacando igualmente que “limita y regula también todo lo relacionado con propaganda electoral, mejora la distribución de puestos de votación, fortalece la observación electoral tanto nacional como internacional; y bueno, creo que da transparencia y eso va a permitir garantizar que tengamos un mejor Código Electoral en Colombia”.
Uno de los puntos que se eliminó durante la discusión fue el que establecía que el transporte el día de elecciones, para ese fin, sería gratuito. Sin embargo, sí se estipula que es plena responsabilidad de los alcaldes de cada territorio garantizar la movilidad.
El Código Electoral actual existe desde 1986, por lo que su actualización ha sido catalogada como una deuda histórica de parte del Congreso. El representante Uribe coincidió al señalar que “el que tenemos hoy definitivamente no responde a las nuevas tecnologías ni a las nuevas dinámicas electorales del país”.
Ahora bien, para que esta iniciativa se convierta en realidad deberá surtir su último debate, en la plenaria de la Cámara de Representantes. Tiene el tiempo justo, pues si no recibe este cuarto aval antes del 20 de junio, y su eventual conciliación, la iniciativa se hundiría, nuevamente por este factor de tiempo.
