En diálogo con El Vbar Caracol, Fabián Sambueza habló sobre el inicio de temporada con Independiente Santa Fe, club al que regresó tras un año, y dio detalles de sus salidas tanto en Deportivo Cali como en Junior de Barranquilla.

Objetivos claros en el León

“Los jugadores somos estados de ánimo. Cuando uno se siente bien e importante, todo fluye; los compañeros ya te entienden y todo se arma. Si uno disfruta lo que hace, todo sale de una manera un poco mejor; en cambio, cuando es un lugar en el que las cosas son forzadas siempre cuesta un poco más. Acá todo ha fluido y estamos contentos”, sentenció sobre cómo se ha sentido en su regreso a la capital.

Sobre las primeras fechas de la Liga, Sambueza inidicó que ya tienen “clara” la idea de juego del entrenador Harold Rivera, pero no contaron con suerte los primeros partidos por la falta de gol. “Hubo partidos de local en los que se nos escaparon los puntos con equipos que venían a esperar o echarse para atrás y lamentablemente tuvimos que remar desde abajo”, indicó.

En dicho sentido indicó que, en su opinión, se han hecha las cosas bien a nivel grupal a lo largo del campeonato, pero no han acompañado eso con “lo más importante”: el resultado. Precisamente eso es lo que le critica a la hinchada, la cual se altera ante la falta de victorias debido a que “la paciencia no está muy trabajada”.

“El hincha quiere ganar como sea, jugando bien o mal; uno trata de hacer las cosas bien, ganar unos partidos para subir en la tabla y trabajar con tranquilidad”, complementó.

Finalmente advirtió que el sueño de ser campeón está intacto: “La ilusión no nos la quita nadie. El que te diga que no quiere ser campeón o que el equipo no tiene cómo hacerlo, se debe retirar de esto o dedicar a otra cosa. Tenemos buenos jugadores. Es un plantel maduro mezclado con jugadores jóvenes que tienen muchísimo para dar. Entre el DT y los más grandes les podemos ayudar. Esta linda combinación me ilusiona mucho”.

Salidas del Cali y Junior

Para cerrar la entrevista, Fabián Sambueza habló sobre sus salidas del Deportivo Cali, equipo que lo trajó al fútbol colombiano, y Junior de Barranquilla, cuadro que lo fichó como estrella del rentado local.

En cuanto al conjunto azucarero, en donde estuvo entre 2016 y 2018, declaró: “No me sentía cómodo con el sistema de juego del entrenador (Gerardo Pelusso). Con eso, a veces pasa que tienes que saber buscar otro rumbo”.

Por otro lado, en el elenco rojiblanco, con quien jugó del 2021 al 2022, la situación fue un poco más complicada por el entorno: “En Barranquilla es complicado. La gente no espera a nadie. Jugás uno o dos partidos y si las cosas no funcionan, debes salir a esperar tu turno. Allá traté de hacerlo de la mejor manera, pero las cosas no fluían. A veces estás bien, otras veces no y si tenías dos partidos malos, ibas al banco. No esperan a nadie. La gente es muy exigente, aunque tiene la razón en eso, pero con esa presión a veces la cosa no fluía y había que luchar con todo”.