Israel reforzó vacunación a cerca del 50% de sus adultos mayores de 60 años
Tras completar diez días del inicio de las jornadas de aplicación de la tercera dosis COVID-19, al menos 600.000 israelíes han recibido el refuerzo.
Casi la mitad de los mayores de 60 años en Israel, unas 600.000 personas, han recibido la tercera dosis de la vacuna de covid-19 desde que comenzara la campaña hace diez días, mientras el Gobierno incide en que los no vacunados acudan también a inmunizarse.
"Este esfuerzo de vacunación es un gran éxito", celebró el primer ministro israelí, Naftali Benet, sobre la tercera inyección, al tiempo que animó a la población que todavía no tiene ninguna a vacunarse ante la imparable propagación de la mutación delta.
"Hoy, el 90 % de los casos graves son de personas con más de 50 años, es decir nueve de cada diez. Por tanto, pido a los ciudadanos israelíes de esta edad que tengan mucho cuidado en las próximas semanas", alertó.
Israel superó hoy los 6.000 positivos en 24 horas, por primera vez desde febrero, y desde las apenas decenas que registraba en junio.
"Es el único país del mundo que actualmente le está dando a su población mayor la posibilidad de recibir una tercera dosis (Pfizer), un refuerzo", defendió Benet, aunque países como Emiratos iniciaron antes la campaña de tercera dosis, en su caso la china, Sinopharm.
El Ministerio de Sanidad aseguró hoy que, de los 600.000 vacunados con la tercera dosis, solo 50 han reportado síntomas, que fueron "leves y pasaron rápidamente (dolor en el lugar de la inyección, fiebre, náuseas)".
De los alrededor de 9,3 millones de personas que residen en Israel, más de un millón de aptos para vacunarse no lo han hecho todavía, un colectivo -mayoritariamente ultraortodoxo y árabe- que paralizó la rápida campaña israelí que en pocos meses alcanzó al 60 % de la población.
Benet insistió hoy en acelerar la inmunización para evitar un cuarto cierre nacional, de cara a las festividades judías del próximo mes.
El país ha tenido que reimponer restricciones, como la mascarilla obligatoria para interiores, el certificado verde para acceder a eventos de más de 100 personas y no ha levantado desde inicios de la pandemia de coronavirus el veto a la entrada de turistas.