Historia sobre la obra del túnel de La Línea

El túnel de La Línea, una obra que por más de 50 años se analizó en Colombia y que fue catalogada como la principal solución vial del país, hoy es una realidad, y tras muchas dificultades, retrasos, incumplimientos y sobrecostos, será entregada en su primera fase este próximo 4 de septiembre.

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La megaobra que beneficiará la movilidad y el tránsito del occidente hacia el centro del país, empezó estudios sobre la cordillera central entre las localidades de Cajamarca (Tolima) y Calarcá (Quindío) en el año 2005. Posteriormente, en diciembre del 2008, se adjudicó y sus ejecuciones empezaron el 14 de abril del 2009, con una promesa de entrega de 70 meses, es decir, entre los años 2015 y 2016 y un valor cercano a los 647 mil millones de pesos.

Problemas del proyecto

Sin embargo, durante ese tiempo fueron muchas las dificultades presentadas por el consorcio a cargo del contratista y empresario Carlos Collins, quien tuvo serias diferencias con el Invias y el Gobierno Nacional y tras varias peticiones para aumentar el plazo de entrega y dificultades financieras, en el 2017 se da por caducado el contrato, hecho que conllevó a Collins a demandar a la Nación por el presunto pago de unas carencias por obras ejecutadas. Sin embargo, el pleito legal ha dado un giro de 180 grados y ahora es el Estado el que tiene demandado al contratista por cerca de un billón de pesos.

Tras superar este impase y con los retrasos generados, el Invias en el 2018 nuevamente adjudica al consorcio La Línea para culminar los trabajos del túnel principal, los viaductos, la doble calzada Calarcá – Cajamarca y demás proyectos complementarios.

Obras ejecutadas en la primera fase

La primera parte, que será entregada este viernes 4 de septiembre, consta del túnel principal de 8.65 kilómetros, catalogado como el más largo de Latinoamérica, un túnel de rescate, paralelo al principal con la misma longitud con cerca de 17 zonas de evacuación, tres túneles de menor dimensión, 343, 627 y 904 metros que suman 1.8 kilómetros, cinco puentes y 13,4 kilómetros de doble calzada entre Calarcá y Cajamarca.

Según el Invias, hasta el momento el costo de la obra supera los 1.40 billones de pesos, con unos sobre costos cercanos al 50%, debido a las dificultades presentadas con el contratista original y el retraso de la obra. Sin embargo, se estima que el total del valor una vez esté ejecutado todo el proyecto con las obras complementarias que están pactadas para el 2021, sea de 2.80 billones de pesos.

Beneficios de movilidad y costos

Según el Invias, la puesta en marcha de este mega proyecto ayudará a disminuir en casi una hora (50 minutos) el trayecto entre el occidente y el centro del país, con un ahorro de 13 kilómetros, además la velocidad al cruzar esta parte de la cordillera central pasará de 16 kilómetros a 60 kilómetros por hora atravesando los 8.65 kilómetros del túnel principal que en promedio podría tardar entre 9 y 11 minutos.

En cuanto a presupuesto, más de 260 mil millones de pesos se podrían ahorrar en operaciones logísticas y costos de fletes al año, se estima que la disminución de cierres viales y de accidentalidad sea superior al 90% y una vez concluidas todas las obras el próximo año, el ahorro en tiempo esté cercano a 1 hora y 20 minutos.