¿Falsos positivos judiciales?

Son numerosos los casos de personas que resultan involucradas en complejos casos y líos judiciales, simplemente porque sus nombres observan algún parecido con el de algún jefe guerrillero o delincuente

Uno de los ejemplos más representativos le ocurre a Pedro Antonio Marín Rivera, un geólogo que estuvo vinculado por más de 20 años a Ingeominas, y quien en múltiples ocasiones ha sido detenido, incluso en el extranjero, por ser homónimo del jefe guerrillero de las Farc Pedro Antonio Marín, alias Tirofijo

La más reciente retención del honrado ciudadano por parte de las autoridades ocurrió en el DAS, a donde acudió hace algunos meses para sacar el pasado judicial

Después de muchos “ires y venires”, certificaciones y explicaciones don Pedro Antonio Marín Rivera se logra demostrar que él nada tiene que ver con la guerrilla

Por su parte un abogado chocoano, John Jairo Mosquera, representa a cuatro ciudadanos que por sus nombres han debido comparecer ante la justicia para aclarar que no son responsables de las actividades ilícitas en las que se les implica

Entre sus defendidos figura José Aristarco Mosquera Maquilón, natural de Apartado, quien en mayo pasado fue “confundido” con alias Maqueison integrante de las Autodefensas

Pese a que el paramilitar Maqueison fue muerto en 2004, su “similar” José Aristarco Mosquera Maquilón estuvo preso casi un mes, mientras demostraba que nada tenía que ver en los delitos de secuestro y extorsión que se le iban a imputar

Otro caso patético lo representa Bernardo Mosquera Orejuela, ex concejal de Bajo Baudó Chocó, capturado y presentado en 2001 como alias “El Negro Antonio” jefe del frente 42 de las Farc, e implicado en 48 procesos legales

La encarnizada batalla jurídica durante ocho años le ha permitido al ex concejal y carpintero chocoano liberarse de 39 de los pleitos, pero sigue vinculado a otros nueve

Entretanto “el verdadero Negro Antonio” fue capturado hace apenas tres meses en la región Sumapáz

Otra víctima de un “falso positivo judicial” es Luis Emiro Mosquera Palacio, quien estuvo ocho meses en la cárcel de Pereira por la confusión existente entre su nombre y el de un jefe guerrillero del Putumayo al que se le atribuye la toma de una localidad