Estado natural de euforia extingue los recuerdos desagradable

LONDRES.--- Químicos cerebrales que influyen en la sensación de bienestar y actúan como el ingrediente activo de la marihuana pueden eliminar los malos recuerdos, dijeron científicos alemanes.
Según los científicos, este hallazgo podría conducir a nuevos tratamientos para los trastornos de ansiedad y las fobias.
Investigadores del Instituto Max Planck de Psiquiatría en Munich, Alemania, demostraron que los químicos naturales del cerebro, similares al tetrahidrocanabinol (THC), el ingrediente activo de la marihuana que provoca el característico estado de euforia, amortigua la acción de las células nerviosas y elimina los recuerdos desagradables.
El THC y moléculas similares, conocidos como canabinoides, se adhieren a los receptores cerebrales y crean un estado de euforia.
Beat Lutz y su equipo de investigación crearon ratones transgénicos, o modificados genéticamente, sin receptores de canabinoides. Cuando condicionaron a los animales para que relacionaran un corrientazo con una nota musical, los ratones reaccionaron con miedo y continuaron experimentando el mismo sentimiento aunque la nota no fuera seguida por una descarga eléctrica.
Los ratones normales dejaron de reaccionar a la nota musical tan pronto como cesaron los corrientazos, pero los roedores modificados genéticamente para carecer del receptor a los canabinoides demoraron mucho más en olvidar la sensación desagradable.
Lutz y su equipo, cuya investigación se publicó en la revista científica Nature, también demostraron que el bloqueo del receptor en ratones normales impidió que los animales olvidaran los recuerdos dolorosos.
Cuando los científicos estudiaron una región cerebral, llamada amígdala, que tiene forma de almendra y es una zona clave para el almacenamiento de la memoria y los sentimientos de temor, en los ratones normales y transgénicos, descubrieron que estaba inundada de químicos naturales, o endocanabinoides, mientras los roedores olvidaban paulatinamente la respuesta aprendida a los corrientazos.
Lutz cree que estos químicos ayudan a eliminar el miedo o los recuerdos desagradables al adherirse a los receptores de canabinoides.
Pero los seres humanos que fuman marihuana no obtienen el mismo efecto, según Lutz, porque la droga invade el cerebro y no es lo suficientemente específica para extinguir los recuerdos desagradables.
Lutz y su equipo creen que los fármacos que tengan como objetivo enzimas específicas para aumentar los canabinoides en la amígdala podrían ayudar a la gente que sufre de ataques de pánico y recuerdos amedrentadores.
"El hallazgo de que los endocanabinoides contribuyen a su eliminación destaca la posibilidad de que medicamentos, que puedan dirigirse a estas moléculas y a sus receptores, podrían constituir terapias útiles para los trastornos de ansiedad", expresó Pankaj Sah, de la Universidad Nacional de Australia, en Camberra, en un artículo publicado en la misma revista.