Basta un poco de humo de tabaco para dañar aprendizaje infantil

BALTIMORE.--- Basta una pequeña cantidad de humo de tabaco inhalado indirectamente para dañar la facultad de aprendizaje de un niño, afectando su capacidad de lectura, matemática y razonamiento, dijeron el lunes investigadores.
Más de 13 millones de niños respiran bastante humo indirectamente como para recibir daños de esta índole, dijeron investigadores del Hospital Infantil de Cincinnati.
"El estudio proporciona nuevos incentivos para que los estados establezcan patrones de salud pública para proteger a los niños de la exposición al humo del tabaco", dijo en una conferencia Kimberly Yolton, del Centro de Salud Ambiental del hospital y directora de la investigación.
Los investigadores analizaron datos obtenidos entre 1988 y 1994 por el Sondeo Nacional de Análisis de Nutrición y Salud, hecho por el Centro Nacional de Estadísticas de Salud.
El sondeo recopiló información sobre la salud y dieta de personas en Estados Unidos. Como parte del estudio, se obtuvieron muestras de sangre de los participantes y éstos completaron cuestionarios. Algunos niños hicieron pruebas para demostrar su capacidad de aprendizaje.
El equipo de Yolton determinó específicamente las concentraciones de cotinina, una sustancia producida por la descomposición de la nicotina en el cuerpo. La cotinina, presente en la sangre, la orina, la saliva y el cabello, se considera el mejor marcador de exposición al humo del tabaco en el medio ambiente.
Los investigadores buscaron a niños con concentraciones muy bajas de cotinina, por debajo de los 15 nanogramos por milímetro de sangre.
El equipo de científicos reclutó a 4.399 niños, entre las edades de seis y 16 años, que tenían concentraciones bajas de cotinina y que dijeron que no habían fumado cigarrillos en los cinco días anteriores al sondeo.
Mientras más cotinina tenían los niños en su cuerpo, menor fue la puntuación promedio obtenida en exámenes de lectura, matemática y razonamiento, dijo Yolton.
"El mayor efecto lo vimos en la lectura", expresó Yolton en una entrevista.
Yolton indicó que otros estudios habían revelado que los niños que vivían con alguien que fumaba menos de una cajetilla al día, tenían menos de un nanogramo por milímetro de cotinina en la sangre. Sin embargo, esta cantidad es suficiente para afectar el aprendizaje.
"A 0,5 (nanogramo) apreciamos cambios importantes en las pruebas cognoscitivas", añadió.
Los investigadores tomaron en cuenta el grado de educación y el salario de los padres de los niños, pero aun así detectaron el efecto nocivo que, según Yolton, sugiere que el humo del tabaco contiene algo que afecta realmente a los niños.

HAY MUCHOS QUIMICOS EN EL HUMO DEL TABACO
"Es difícil decir qué es lo que provoca esto, porque hay muchos químicos en el humo del tabaco", dijo Yolton.
El 43 por ciento de los niños en Estados Unidos está expuesto al humo del tabaco ambiental en el hogar, según Yolton. El 85 por ciento de los niños muestra concentraciones notables de cotinina en la sangre.
"Estimamos que más de 13 millones de niños en Estados Unidos están expuestos a concentraciones consistentes con los efectos adversos vistos en este estudio", expresó durante una conferencia anual de las Sociedades Académicas de Pediatría.
Es difícil proteger a los niños del humo del tabaco, añadió. "Hay una investigación que estudió a los padres que decían que sólo fumaban fuera del hogar y se halló un descenso notable de cotinina en los niños, pero no desapareció del todo", explicó.
Yolton dijo que su equipo estaba probando filtradores de aire súper eficaces en los hogares de fumadores para ver si ayudaban en algo.