Trabajar el campo es duro, pero es la mayor riqueza: campesinos en su día

Bogotá

El trabajo en el campo es duro y no ha sido suficientemente reconocido por la sociedad, pero es invaluable y genera muchas satisfacciones, coinciden en afirmar los labriegos en el Día Nacional del Campesino, que desde comienzos de los años sesenta se celebra el primer fin de semana de cada mes de junio.

Hablamos en Al Campo, de Caracol Radio, con dos mujeres campesinas, una en el departamento de Nariño y otra en Sucre, y a pesar de la distancia y de no conocerse, coincidieron en afirmar que pese a las adversidades que se viven en las zonas rurales de Colombia, no cambiarían su trabajo, ni su vida en los campos.

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Una de ellas es Aura Alicia Mora, quien vive en el corregimiento Olaya, del municipio de Túquerres, en el departamento de Nariño y quien en entrevista con Al Campo dijo que todos sus 64 años de vida han sido en la ruralidad. Actualmente se dedica a la siembra de papa, a la ganadería de leche y a la cría de cuyes y gallinas, entre otras actividades.

Sostuvo que, aunque le toca trabajar “al sol y al agua” lo hace con mucho agrado y anotó que, aunque las labores son muy duras, “no hay mayor riqueza que vivir en el campo”.

Aura Alicia hace parte de la Asociación de Productores de Cuyes del municipio de Túquerres, conformada en su mayoría por adultas mayores que están tecnificando la cría y la comercialización, y así nos contó su experiencia.

Huyéndole al sol del medio día

También hablamos en Al Campo, de Caracol Radio, con Alfra de Jesús Izquierdo García, otra mujer rural que vive en la vereda Centro Azul, del municipio de San Antonio de Palmito, en el departamento de Sucre y quien, con su tono y alegría del Caribe, afirmó que vive muy bien en el campo, que trabaja duro y que lo hace con la misma fuerza y tal vez más empeño del que ponen los hombres.

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Alfra de Jesús, de 50 años, cultiva yuca industrial, yuca venezolana arroz, ñame, maíz y otros productos que le permiten un modo de vida aceptable, aunque afirma que hay épocas difíciles generadas por el clima y los precios que, en ocasiones, son de pérdida.

Esta fuerte mujer campesina hace parte de la Asociación de Productores Lácteos de Palmitos y, además de las labores agrícolas, se dedica a la transformación de leche. Hace quesos, suero, yogures y otros productos que vende en su región y, en ocasiones, los llevan hasta Sincelejo, la capital departamental.

Tanto Aura Alicia Mora, de Túquerres, y Alfra de Jesús Izquierdo García, de San Antonio de Palmito, son beneficiarias de El Campo Emprende y afirman que este programa del Ministerio de Agricultura les ha permitido fortalecer sus trabajos y sus emprendimientos.

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