Habitantes de La Celia denuncian afectaciones por secadoras de café

Pereira

Estas secadoras de café, conocidas como Silos, son más de cinco y están ubicadas en el casco urbano de La Celia, incluso algunas de ellas se encuentran muy cerca de instituciones educativas donde hay constante presencia de niños.

Hay que mencionar que este proceso de secado de café genera contaminación sonora, material particulado, gases y vapores de combustión y, debido a la falta de existencia o actualización de los Planes de Ordenamiento Territorial se encuentran ubicados en zonas residenciales, lo que ha generado múltiples quejas y demandas de los ciudadanos. 

Otra denuncia que hace la comunidad de ese municipio a través de los micrófonos de Caracol Radio está relacionada con que sus hijos están expuestos constantemente al humo y olor que emiten las secadoras de café, lo que genera sensación de ahogamiento y obliga a los docentes a salir con sus alumnos de las aulas de clase para tomar aire.

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También señalan los habitantes de La Celia que estas secadoras de café les genera tos y problemas respiratorios, especialmente a la población mayor.

"Nos causa problemas respiratorios y en la garganta. En la escuela hay niños pequeños y esto lleva muchos años; además hay muchos abuelos de más de 80 años que son los más afectados con ese olor. En estos momentos que hay más frío y viento, es peor la situación, siempre huele a quemado", aseguró una de las habitantes de esa localidad.

Frente a esta problemática, el alcalde de La Celia, Jhon Jairo Soto, explicó que esta situación se encuentra ya en manos de las autoridades judiciales y se espera que un juez falle a favor de la comunidad y obligue a los propietarios de estos silos a trasladarse fuera del casco urbano del municipio, para lo cual la administración pondría a disposición varios lotes.

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"Sí hay unos ubicados contiguos a escuelas, es un proceso que viene de administraciones anteriores y eso está ya para fallo de juzgado. Al momento que nos toque acatar la decisión del juez, la acataremos inmediatamente porque soy consciente del daño que les hace a los niños; pero estamos esperando la medida del juzgado para tomar una decisión. Si es necesario que el municipio les adopte un terreno para que estos privados se reubiquen, estaríamos en condiciones de hacerlo", aseguró Soto.

Esta problemática también se registra en otros municipios de Risaralda de tradición cafetera, donde se lleva a cabo este proceso de secado antes de vender el grano a las trilladoras.