Asesinato de Miguel Uribe Turbay: responsabilidades y el futuro del ejercicio político en Colombia
Panelistas analizaron el panorama político que se avecina para el país, así como las responsabilidades de la ciudadanía, el sector privado y la clase política, en el contexto de las elecciones del próximo año; tras el magnicidio del senador Miguel Uribe Turbay.

Asesinato de Miguel Uribe Turbay: responsabilidades y el futuro del ejercicio político en Colombia
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Una bandera de Colombia en la silla donde se ubicaba el senador Miguel Uribe Turbay en el Congreso de Colombia. (Foto: RAUL ARBOLEDA/AFP via Getty Images)
En Hora20 un programa para reflexionar y analizar sobre el momento que vive Colombia luego de la muerte del senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, dos meses después de ser víctima de un atentado criminal el sábado 7 de junio en un acto de campaña en la localidad de Fontibón en Bogotá. Una mirada también a los llamados de unión, la instrumentalización de este crimen político, y un recuento del pasado violento en la historia colombiana.
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Lo que dicen los panelistas
Mauricio García Villegas, doctor en Ciencia Política, abogado, profesor universitario, autor de “El país de las emociones tristes”, columnista en El Espectador y socio fundador de DeJusticia, invitó a mantener la calma y entender que no estamos todavía en la situación que estábamos a mediados de los años 80s, “esto es un llamado a prender una alarma por la situación que estamos viviendo. Este país está lleno de odios y es perjudicial afirmar en redes sociales que ha vuelto la misma violencia política“. También, dijo que ha mejorado la situación política a nivel nacional y en las grandes ciudades, “una de las grandes características de Colombia es que la guerra no se sentía tanto en las ciudades, a excepción de los años 80, siempre ha sido un asunto de los territorios donde la violencia política sigue siendo igual o peor”.
Por otro lado, afirmó que el discurso del presidente Gustavo Petro se asimila más al de un actor político que como el jefe de Estado, “muchas veces el Presidente actúa más como el jefe de un partido, que como el representante de la institución que encarna. Es muy importante para solucionar problemas como este recuperar esa función institucional y del presidente en situaciones donde es fundamental que exista unidad y un símbolo de unidad nacional, que represente a los colombianos independientemente de nuestras posiciones políticas”.
Para Juanita Goebertus, directora para las Américas de Human Rights Watch, la violencia política puede ser instrumentalizada y, “lo más duro de usar el atentado y la muerte de Miguel Uribe de forma política, es el sentimiento de duda sobre qué generación se queda por fuera de la posibilidad de hacer política por el miedo que este genera”. Además, añadió que, “si la política costara la vida de las personas muy pocos la practicarían”.
De igual manera, reconoció que en la actualidad se vive un momento de menor violencia que en el pasado, “a partir de 2002 empieza un proceso de descenso en los indicadores de violencia por medio de políticas de seguridad y de paz que culmina en 2017 con las cifras más bajas de violencia”. Sin embargo, resaltó que no se debe desmeritar que hay un aumento en los índices de violencia y una situación que viene en deterioro desde el 2019, “si uno compara primer semestre del 2025 con primer semestre 2024, hay un aumento del homicidio del 3%, en secuestro del 53%, en asesinato de fuerzas militares del 100% y de la policía del 216%, sumado al aumento sostenido de número de víctimas por hechos de violencia que se ha cuadruplicado”.
Mónica Pachón, politóloga, profesora de diseño en la Universidad de los Andes y exdirectora de Congreso Visible, afirmó que no se puede afirmar que estamos en la misma situación que en los años 90, “desconocer que Colombia ha mejorado en el control del Estado sería desconocer años de trabajo de muchos gobiernos”. Empero, insistió que en la actualidad siente una sensación de «orfandad», “las personas que encabezan las instituciones en este momento no han tenido el liderazgo para que los ciudadanos tengan a alguien a quién mirar; un discurso que nos pueda unificar a los colombianos". Igualmente, hizo un llamado a los candidatos presidenciales, la sociedad civil y los privados a la unión, “el presidente Gustavo Petro tiene que escuchar el clamor de todos nosotros”.
José David Riveros, abogado, consultor y exsecretario de Gobierno de Bogotá, señaló que Colombia todavía tiene una herida abierta, “aunque haya logrado tener esperanza de resolver su pasado, no ha sido suficientemente capaz de resolver sus problemas”. Adicionalmente, subrayó que con, respecto a la responsabilidad en el atentado, “es claro que el gobierno es quien tiene que responder por la seguridad de los candidatos y cifras en los niveles de inseguridad”.
Jorge Mantilla, politólogo, doctorando en Criminología y experto en dinámicas del conflicto, distinguió que el caso de Colombia no es un hecho aislado, “la violencia política está creciendo en todo el mundo. Las agencias de inteligencia de EE. UU. y Japón están registrando el aumento de los crímenes de odio con preocupación. No hemos logrado salir de esa lógica de violencia del pasado, pero el futuro tampoco es muy optimista como producto del fenómeno de la polarización"
De igual modo, aseguró que la desinformación en conjunto con la polarización genera violencia, “el Presidente debe hacer un llamado a sus propias filas a no propagar y difundir este tipo de información en este tiempo. Vimos personas del gobierno y afines a este, planteando que había sido un autoatentado y que habían visto a Miguel Uribe caminando en la Fundación Santa Fe, o hasta un falso comunicado”.



