El uso reiterado de ChatGpt estaría “pudriendo” su cerebro, según el MIT

Desde la introducción de herramientas de inteligencia artificial como ChatGPT, los científicos se han preguntado si esta herramienta podría llegar a ser más perjudicial para el desarrollo cognitivo de los humanos, o si, por el contrario, puede ser beneficioso para quienes lo utilizan.

La preocupación principal recae en saber si los seres humanos se podrían volver más dependientes de la herramienta y no desarrollar el pensamiento crítico adecuado, al estar dependiendo una y otra vez de la IA.

Un estudio llevado a cabo por el MIT parece apuntar a que, en efecto, utilizar demasiado la herramienta para escribir y hacer otro tipo de actividades estaría “pudriendo” nuestro cerebro e impidiendo el desarrollo de habilidades cruciales para nuestro funcionamiento.

¿Qué encontró el estudio?

Este estudio del MIT analizó cómo afecta el uso de herramientas como ChatGPT al proceso mental de escribir ensayos. Participaron 54 estudiantes, divididos en tres grupos: uno que usó solo ChatGPT, otro que usó buscadores tradicionales (como Google) y un tercero que escribió sin ninguna ayuda externa.

Durante las sesiones, se midió la actividad cerebral con electroencefalografía (EEG) y se evaluó la calidad de los ensayos con profesores y un sistema de inteligencia artificial. También se hicieron entrevistas.

Estos fueron los principales hallazgos del estudio del MIT:

1. Menor esfuerzo mental con IA: Quienes usaron ChatGPT mostraron menor actividad cerebral relacionada con el esfuerzo cognitivo. Su cerebro trabajó menos que el de quienes buscaron información por su cuenta o escribieron sin ayuda.
2. Peor memoria: El grupo que usó ChatGPT tuvo más dificultades para recordar lo que había escrito, incluso pocos minutos después de terminar el ensayo.
3. Menor sentido de propiedad: Muchos dijeron que no sentían que el ensayo fuera realmente suyo, a diferencia de quienes escribieron solos o con ayuda de buscadores.
4. Ensayos más homogéneos: Los textos generados con ChatGPT tendían a parecerse mucho entre sí y usaban estructuras y frases comunes. Eran más “genéricos”.
5. Al cambiar de herramienta se notaron efectos: Cuando los que antes usaban ChatGPT escribieron sin ayuda, su cerebro trabajó poco. Pero los que pasaron de escribir sin ayuda a usar ChatGPT mostraron más actividad cerebral, como si estuvieran comparando o adaptando lo que sabían.
6. Puntajes: Aunque los ensayos generados con IA podían obtener buenas calificaciones superficiales, eran menos variados y con menor riqueza conceptual que los escritos sin ayuda.

¿Qué concluye el estudio?

Aunque usar ChatGPT puede parecer eficiente y útil, a largo plazo puede perjudicar habilidades clave como la memoria, la escritura crítica y la apropiación del conocimiento. Es decir, si dependemos demasiado de estas herramientas, podríamos estar “apagando” parte de nuestro cerebro.

Este estudio sugiere que debemos usar la inteligencia artificial con cuidado en entornos educativos, para no debilitar nuestras propias capacidades cognitivas. Todo esto debido a que los resultados se han encaminado a demostrar que el uso de a IA para escribir ensayos de forma crítica puede ser perjudicial.

Ahora bien, un reciente comentario de la Revista The Conversation, Vitomir Kovanovic, profesor de la Universidad de South Australia, asegura que no necesariamente el uso de ChatGpt para hacer ensayos podría ser perjudicial, y critica que el estudio utilizó una medida poco precisa para llegar a esas conclusiones.