Así queda el límite de velocidad en Bogotá: esto dijo la Secretaría de Movilidad

La Secretaría de Movilidad de Bogotá anunció que, tras un estudio técnico exhaustivo y el análisis de datos recientes, la velocidad máxima en las principales vías de la ciudad seguirá establecida en 50 kilómetros por hora. Esta decisión se apoya en criterios técnicos y evidencia internacional que apuntan a salvar vidas y reducir la siniestralidad vial.

Este anuncio se enmarca en la estrategia integral que adelanta la administración distrital para reforzar la cultura de respeto en las vías, y se basa en una metodología avalada por la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV).

Bogotá se convierte así en la primera ciudad del país en implementar de forma completa este modelo técnico para establecer límites seguros de velocidad en 14 corredores estratégicos de alto flujo vehicular.

Reducción significativa en exceso de velocidad

Uno de los datos más destacados proviene de un reciente informe elaborado por la Universidad Johns Hopkins, en el marco de la Iniciativa Bloomberg para la Seguridad Vial Global. Según el estudio, el número de conductores que supera los límites de velocidad se redujo del 42 % en febrero de 2024 al 30 % en marzo de 2025. Esta caída representa una mejora sustancial en el comportamiento de los conductores y ubica a Bogotá en una posición más favorable en la región latinoamericana.

En el mismo periodo, los motociclistas también mostraron una tendencia a la baja en cuanto a excesos de velocidad, aunque siguen siendo los actores viales más propensos a infringir los límites establecidos. El porcentaje pasó del 61 % al 47 %, una señal alentadora, aunque todavía representa un desafío para las autoridades.

Infraestructura y pedagogía

Para alcanzar estos resultados, el Distrito apostó por una combinación de acciones enfocadas en infraestructura, control y educación. Entre las medidas implementadas se destaca la instalación de resaltos parabólicos, una innovación vial que busca forzar la reducción de velocidad de forma segura. A la fecha se han instalado 24 de estos dispositivos y se espera la implementación de 150 más antes de finalizar el año.

En paralelo, la estrategia pedagógica ha cobrado fuerza con la campaña “No somos una cifra, respeta el límite”, que busca sensibilizar a los ciudadanos sobre el impacto real que tiene el exceso de velocidad en las vidas humanas. Esta campaña ha estado acompañada de más de 400 jornadas pedagógicas realizadas en diferentes puntos críticos de la ciudad, con enfoque especial en la protección de los usuarios más vulnerables como peatones y ciclistas.

Impacto directo en la reducción de fatalidades

Gracias a estas acciones conjuntas, entre enero y abril de 2025, Bogotá logró una reducción del 15 % en muertes por siniestros viales, en comparación con el mismo periodo del año anterior. Esta cifra representa un avance concreto en el objetivo de disminuir las fatalidades en las vías y refleja el impacto positivo de una política pública basada en datos y buenas prácticas internacionales.

La secretaria de Movilidad, Claudia Díaz, destacó que la ciudad seguirá trabajando de manera decidida para consolidar una movilidad segura. “Gestionar adecuadamente los límites de velocidad es una herramienta fundamental para prevenir tragedias en las vías. Continuaremos con acciones de control, infraestructura y pedagogía para fortalecer el respeto por las normas y salvar vidas en las calles de Bogotá”, afirmó.