¿Ha incidido la paz total en incrementar las distintas dinámicas de violencia en el país?
Panelistas creen que sí hay una conexión entre la idea de paz total y un aumento en dinámicas como la extorsión y secuestro; otros consideran que son dinámicas que se deben separar.

¿Ha incidido la paz total en incrementar las distintas dinámicas de violencia en el país?
53:30
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Paz en Colombia | Foto: GettyImages
En Hora20 una mirada a la seguridad del país ante un panorama de secuestros como el de Lyan en Cali, de homicidios, como el que se vio hoy relacionado con ese caso, de amenazas como las que ha recibido el director de la Policía y sobre el futuro de las mesas de paz del Gobierno que van desde ceses inciertos hasta nuevas mesas de diálogo.
Lo que dicen los panelistas
Juanita Vélez, periodista, politóloga, cofundadora e investigadora de la Fundación Conflict Responses, planteó que el futuro del cese con Calarcá está en un limbo, “hay un carril que es el del Alto Comisionado y lo que hay en cocción en la redacción del decreto para suspender los operativos contra Calarcá y como no hay decreto, entonces hay ataques y ese limbo es grave y llevamos días sin saber qué va a pasar y eso puede hacer que la mesa se rompa”.
Sobre las dinámicas de subcontratación, dijo que esto no es nuevo, “que la disidencia, que está por fuera de negociaciones como es el caso de Mordisco y la Jaime Martínez realicen el secuestro y en esas condiciones, es la demostración de la degradación. pero el fenómeno de subcontratación no es nuevo y no depende de la Paz Total porque hoy la estrategia es golpear a Mordisco y a esas unidades, no lo leo como una cosa de paz total, sino como fenómeno que pasa hace mucho y muestra degradación de conflicto y de que disidencia está alejada de ideales políticos”.
Para Luis Trejos, investigador en temas del conflicto, profesor en la Universidad del Norte y columnista, lo que ocurrió con el secuestro de Lyan se debe leer en clave de vendetta entre mafiosos, que termina enrareciendo el deterioro de la seguridad, pero que también refleja los problemas de incapacidad estatal, “la liberación no se da por presión institucional o un operativo sobre las unidades del EMC que tenían al niño, parecía que se resolviera pagando, se presiona para que paguen y eviten problemas, entonces vemos la degradación o desideologización porque lo que vemos es que esta unidad de la disidencia termina convirtiéndose en brazo armado de organizaciones mafiosas; contratistas de criminales para prestar servicio de secuestro”.
Frente a lo que está pasando con las amenazas al director de la Policía, dijo que en la medida que se pasó de un escenario de pasividad, a un momento de ofensiva en los últimos meses con la llegada del Nuevo Ministro de Defensa, se generó la reacción de los grupos armados, “ellos se acostumbraron a un equilibrio con el gobierno y se discriminó el uso de la violencia contra la Fuerza Pública”, pero resaltó que una vez se rompen los ceses y pasamos a lo defensivo, hay reacción que es natural en toda confrontación armada, “lo que parece es que tratan de presionar al gobierno con chantaje”.
En cuanto al futuro de mesas de negociación, dijo que en el caso del Frente 33 no se tocan tema claros como el marco jurídico y la dejación de armas, dos elementos, que cree, son claves para el futuro de cualquier proceso de paz.
Manfred Grautoff, consultor en temas de seguridad, columnista, estratega militar y especialista en inteligencia, recordó que hace unos días el Presidente hablaba de la reducción de homicidios en el país, “eso es edulcorar la estadística porque la extorsión, el secuestro, el reclutamiento y el terrorismo crece; hay un desequilibrio en la política de seguridad”. De hecho, dijo que la política de seguridad del país ya no pasa por el Ministerio de Defensa, sino por la Oficina del Alto Comisionado para la Paz.
Le puede interesar: JEP ordena reforzar seguridad de firmantes de paz
Frente a lo que revela lo ocurrido en Jamundí, dijo que la dinámica es similar a la de Medellín en la década de los 90 donde bajo el manto de Pablo Escobar se cubrieron hechos de criminalidad y venganzas criminales, algo que disparó la violencia. En esa medida, dijo que no se pueden aislar los hechos de violencia en el país y la incidencia que sí ha tenido la política de paz total en las dinámicas de violencia que hoy se viven.
Esteban Salazar, analista e investigador en temas del conflicto, planteó que lo que ocurrió con el secuestro del niño es diferente a lo que ocurre con las mesas de negociación, “sobre el secuestro llama la atención que se reveló información hoy sobre la realidad compleja que viene del 2013 que es un caso que arrastra desde el asesinato del papá, este era alias “Mascota” y empezó en criminalidad con Diego Rastrojo, fue asesinado en 2013 y este problema revela que tenemos un arrastres un asuntos de Estado y no logramos perseguir bienes de criminalidad porque se supone que esto no es de disidencias, viene es de un soporte extorsivo, no de aumentar arcas de la guerra, fue una contratación a la disidencia”. Bajo ese argumento, manifestó que no se puede tomar la paz total como saco de boxeo fácil, “esto fue cometido por las disidencias del EMC y responde a la dinámica de contratar organizaciones criminales para solucionar problemas de tiempo atrás”.
Sobre la violencia contra la Fuerza Pública, dijo que esta es una situación cíclica cuando el Estado toma decisiones contundentes contra la criminalidad, “si hoy tenemos una presión es porque los resultados generan incomodad a los grupos armados, en específico al Clan de Golfo y particularmente es al que la paz total no lo va a cobijar nunca porque es un holding criminal que no va a negociar el sometimiento, la situación es normalizada, pero que se viene escalando en plan fusil”.
¿Ha incidido la paz total en incrementar las distintas dinámicas de violencia en el país?
53:30
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles