La JEP acredita como víctima del conflicto armado al río Magdalena
El reconocimiento hace parte de un enfoque más amplio adoptado por esta justicia, que reconoce a la naturaleza y los territorios como afectados del conflicto

Río Magdalena. Foto: Unidad de Gestión del Riesgo de La Dorada.
Bogotá
La Sala de Reconocimiento de Verdad de la Jurisdicción Especial para la Paz decidió acreditar al río Magdalena como víctima y sujeto de derechos en el contexto del conflicto armado.
Esta acreditación se da respondiendo la solicitud hecha por varias organizaciones sociales y de víctimas que señalaron las afectaciones sufridas por el río Magdalena a raíz de la desaparición forzada de personas, la contaminación de hidrocarburos por los atentados a la infraestructura petrolera producto del robo de gasolina, la contaminación por fumigaciones con glifosato y modificaciones en el cauce del río, la contaminación por vertimientos de desechos producto de la explotación ilegal del oro y el carbón y la ruptura del tejido social de las comunidades que protegen y viven en el río.
Los relatos de las víctimas evidencian cómo las poblaciones cercanas al río Magdalena se convirtieron en testigos involuntarios de los crímenes cometidos por diversos actores armados que operaron en la zona, quienes utilizaron el río para desaparecer a sus víctimas. Según la investigación adelantada por la JEP los testimonios revelan el profundo impacto psicológico y social que estas experiencias traumáticas dejaron en las comunidades, para quienes se volvió cotidiano encontrar los cuerpos de las víctimas en el río.
Además, en lo recopilado por esta justicia transicional se refleja el terror para la gente, ver cuerpos bajar por el río y no poder recogerlos para darles sepultura, pues podían ser señaladas por los grupos paramilitares y por miembros de la fuerza pública.
Esta decisión se da en medio de la investigación del subcaso Magdalena Medio del Caso 08, que investiga los crímenes cometidos por miembros de la fuerza pública o en asociación con grupos paramilitares, otros agentes del Estado, y/o terceros civiles en el marco del conflicto en Colombia.
En el Subcaso Magdalena Medio se ha priorizado la investigación de los hechos conocidos como ‘la toma paramilitar de Barrancabermeja‘, ocurrida entre 1998 y 2001. En esta investigación, se han acreditado 343 víctimas, incluyendo a 7 sujetos colectivos; se han realizado 25 versiones y declaraciones juradas; y se han practicado 7 inspecciones judiciales a unidades militares, policiales, entes estatales y medios de comunicación.