El inquietante hallazgo en el fondo del mar de Belice que desconcierta a los científicos
El océano de Belice oculta un enigma que desconcierta a los científicos y podría cambiar lo que sabemos

Inquietante hallazgo en el fondo del mar de Bélice
Las profundidades de nuestro océano siguen siendo un misterio para el ser humano. Hemos explorado muy poco de nuestros mares. Se estima que al menos del 5% del fondo marino ha sido explorado, dejando un 95% por descubrir.
Esto se debe en gran parte por la dificultad de exploración que supone adentrarse en las profundidades del mar. A esto además se le suma lo vasto y profundo que es el océano, en promedio la profundidad es de 3900 metros, pero hay puntos como la fosa de las Marianas que alcanzan los 11.000 m de profundidad.
De hecho, una reciente expedición al fondo del famoso Gran Agujero Azul de Belice informó revelaciones preocupantes luego de un descubrimiento que hicieron en el fondo de este pozo del Caribe, el cual podría ser un claro indicio de afectaciones que involucran la vida cotidiana de miles de personas alrededor del mundo.
¿Qué se encontró?
Una expedición liderada por Dominik Schmitt de la Universidad Goethe de Frankfurt perforó el fondo del Agujero Azul. Allí extrajeron un núcleo de sedimento de 30 metros de largo, por medio de una precisión técnica, ya que el sedimento es frágil y está muy compactado.
Al analizarlo descubrieron 694 capas de sedimento, las cuales están asociadas a un fenómeno natural que cada vez preocupa más al ser humano: los ciclones. Como en el fondo del Gran Agujero no hay oxígeno, y las aguas están estratificadas por capas, los sedimentos que caen ahí no se alteran ni se mezclan, lo que permite que se mantengan intactas.
Cada capa representa un evento ciclónico, como tornados o huracanes, que pasaron por ahí y dejaron esos rastros físicos: los sedimentos más gruesos, más claros y con materiales más grandes que los normales. Estas capas permitieron crear un registro de actividades ciclónicas de los últimos 5.700 años.
¿Por qué es preocupante el descubrimiento?
El núcleo encontrado en el fondo del mar de Belice revela un aumento constante en la cantidad y fuerza de los ciclones durante los últimos 5.700 años. Identificaron que el aumento está relacionado con el cambio de posición de la Zona de Convergencia Intertropical, que es una franja cerca de la línea del Ecuador donde se forman distintas tormentas.
Esto se debe principalmente porque cuando el planeta se calienta, la zona cambia de posición, afectando dónde y cuántos ciclones se forman. De hecho, el calentamiento global actual podría disparar aún más la frecuencia y fuerza de los ciclones.
Los estudios revelan que en los últimos 20 años ya han pasado nueve ciclones por esa zona específica del Caribe, rompiendo con el patrón histórico de frecuencia. En general, este siglo podrá presenciar hasta 45 ciclones, lo que es un aumento exponencial en comparación con los datos del pasado.
Este es el registro más detallado de tormentas en el caribe registrado a lo largo de los milenios. Confirma que el cambio climático no solo aumentará la cantidad de ciclones sino su intensidad.
Las implicaciones son directas para los países del Caribe, Centroamérica y la costa este de los EEUU. En el Caso de Colombia, la costa norte y la región insular podría sufrir aún más que en los últimos años. Sugiere que los modelos climáticos actuales podrían estar subestimando el impacto futuro del calentamiento global.