Crisis ministerial deja un “Gobierno debilitado” de cara al cierre de mandato, advierten analistas
El presidente Petro, según consideran los expertos, está alejándose de las bases radicales de la izquierda para este último año y medio de gobierno.

Consejo de ministros del Presidente Petro.(Colprensa)
Congreso
A 18 meses de finalizar su gestión, el presidente Gustavo Petro enfrenta un nuevo remezón ministerial con al menos tres ministros que presentaron su renuncia irrevocable: Juan Fernando Cristo (Interior), Gloria Inés Ramírez (Trabajo) y Ambiente (Susana Muhamad). Estos ajustes van a tener un impacto en la agenda y los objetivos que ha trazado el ejecutivo.
“Pasar de renuncias protocolarias e irrevocables de los alfiles más cercanos al petrismo demuestra las profundas divisiones que se tienen y un cambio completo en el nuevo direccionamiento de un gabinete que entra en la fase final del gobierno, que es un gabinete de cierre, que que va a tener que enfrentar crisis presupuestales de ejecución, de seguridad, de gobernabilidad, de legitimidad política y en donde el presidente ha puesto de manifiesto que busca que su nuevo gabinete esté en la capacidad y en las condiciones de ejecutar su plan de gobierno”, expresó el académico Gabriel Cifuentes.
El experto consideró que “ese balance entre un gabinete leal y un gabinete político va a ser muy difícil de encontrar, y así sea incorrecto hacer gabinetología, el hecho de que Benedetti se haya atornillado por encima incluso de ministros leales al proyecto progresista y al presidente da luces frente a las decisiones que se vendrán en los próximos días y que seguramente buscarán reconformar un gabinete con criterios políticos para enfrentar las elecciones del 2026, para tratar de salvar los proyectos del gobierno en el Congreso”.
El gerente de la Consutora Estrategia y Poder, Carlos Arias, también sostuvo que “la crisis ministerial que fue propiciada por el propio presidente dejó ver cómo su gobierno estaba roto y su proyecto político está debilitado. Deja a un gobierno aún más ralentizado, a una ejecución presupuestal paupérrima que hoy no tiene claro quiénes son las cabezas en sus ministerios; deja un gobierno quebrado, fisurado frente a la opinión pública y sin poder resolver los problemas de los colombianos no en los nueve meses que le quedan antes de la ley de garantías y de oficialmente estar en campaña”.
El analista colombofrancés Yann Basset, por su parte, comentó: “el presidente anunció que ya era tiempo de nombrar un gabinete que iba a implementar verdaderamente el cambio por el cual votó el pueblo. El problema es que para elegir ministros que hagan esto, pues hay los que pueden y hay los que quieren y no necesariamente son los mismos. Es decir, hay los que pueden porque tienen el manejo político, la experiencia, etc. para manejar los ministerios pero que no necesariamente comparten el proyecto político del presidente o no en su totalidad y hay lo contrario, los que son activistas o políticos de izquierda pero que no necesariamente tienen este manejo para realizar las cosas”.
Por esto, añadió Basset, “vamos a ver en este nuevo gabinete que va a nombrar el presidente qué dosis de voluntarismo político y de experiencia vamos a tener, pero va a ser muy difícil para él combinar las dos cosas en esta altura, que es un momento crucial porque para llegar a estas elecciones de 2026 necesita ya mostrar resultados, ejecutar recursos para poder defender su balance en 2026″.