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Tragedia en Córdoba: Muertes por ahogamiento conmocionan a Moñitos y Lorica

Un joven de 18 años y un niño de 10 perdieron la vida en dos tragedias acuáticas en poblaciones de Córdoba.

Alejandro Ballestas y Franklin Torres murieron por inmersión.

Alejandro Ballestas y Franklin Torres murieron por inmersión.

Montería

Dos historias de tragedia han conmocionado a las comunidades locales. En el balneario Miramar, en Moñitos, Alejandro Ballesta, un joven valiente, perdió la vida intentando salvar a dos mujeres que se ahogaban. Su heroísmo no fue en vano, ya que otro joven logró rescatar a las mujeres con un balón. Lamentablemente, Alejandro se sumergió y no volvió a salir.

Mientras tanto, en el corregimiento San Nicolás de Bari, Lorica, el pequeño Franklin Alexander Torres Loaiza, de 10 años, murió tras lanzarse al agua desde un árbol en el Caño Chimalito. Su cuerpo sin vida fue encontrado por voluntarios.

Un héroe anónimo pierde la vida

En un trágico suceso que conmocionó a la comunidad de Moñitos, Córdoba, un joven llamado Alejandro Ballesta, de 18 años y natural de San Bernardo del Viento, perdió la vida mientras intentaba salvar a dos mujeres que se estaban ahogando en el balneario Miramar. El hecho ocurrió el domingo 13 de octubre, pero su cuerpo sin vida fue hallado hasta la mañana del lunes 14 de octubre.

Según testigos, Alejandro se encontraba en la playa con dos amigas cuando notó que las jóvenes se estaban ahogando. Sin dudarlo, se lanzó al agua para rescatarlas, demostrando un acto de valor y solidaridad que terminó en tragedia. Aunque otro joven logró rescatar a las mujeres con un balón, Alejandro se sumergió y no volvió a salir.

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La comunidad ha cuestionado la falta de servicio de salvavidas en los balnearios de Córdoba, lo que podría haber prevenido esta tragedia. La ausencia de medidas de seguridad adecuadas en lugares públicos como playas y balnearios puede tener consecuencias fatales, como lo demuestra este caso.

La muerte de Alejandro Ballesta es un recordatorio de la importancia de la prevención y la seguridad en lugares de recreación. Su sacrificio no será olvidado, y su memoria servirá como un llamado a la acción para mejorar la seguridad en estos lugares.

Pesar en zona rural de Lorica

Una sombra de dolor y consternación se ha extendido sobre la vereda Caño Viejo, en el corregimiento San Nicolás de Bari, municipio de Lorica, tras la trágica muerte del pequeño Franklin Alexander Torres Loaiza, de apenas 10 años de edad.

El domingo 13 de octubre de 2024, un día que comenzó con inocencia y diversión, terminó en tragedia. Según testimonios de lugareños, Alexander disfrutaba de un refrescante baño en el Caño Chimalito, cerca de la desembocadura del Río Sinú, acompañado de sus amigos.

En un momento de juego, el niño se lanzó de cabeza desde la cima de un árbol al agua, pero, en un instante, desapareció bajo la superficie. La búsqueda intensa que siguió terminó en tragedia cuando voluntarios rescataron su cuerpo sin vida.

La comunidad de Caño Viejo, donde Alexander estudiaba en la escuelita local, se une en el dolor por la pérdida de esta joven vida llena de promesas. Su cuerpo fue trasladado a la sede de medicina legal de Santa Cruz de Lorica para realizar la necropsia. Posteriormente, será entregado a su familia para que reciba una sepultura digna.

La muerte de Alexander ha sumido a Lorica en un profundo luto, recordando la fragilidad de la vida y la importancia de la vigilancia constante sobre nuestros seres queridos, especialmente en momentos de recreación. La comunidad local y las autoridades locales han expresado sus condolencias a la familia del pequeño Alexander, en este momento de inmensa pena.

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