El Clan del Golfo entregará las armas cuando se firme el proceso de negociación: abogado

A inicios de julio de este año, el Gobierno Nacional anunció, a través de una resolución ejecutiva, el inicio de diálogos con el Clan del Golfo o la autodenominada organización armada Ejército Gaitanista de Colombia (EGC), el grupo armado más grande del país.

De acuerdo con la resolución, el fin de este “Espacio de Conversación Sociojurídico” es verificar la voluntad de transitar hacia el Estado de Derecho” de esta organización criminal al mando de Jobanis de Jesús Avila Villadiego, conocido como Chiquito Malo.

En diálogo con 6AM Ricardo Giraldo, abogado y representante del Ejército Gaitanista, aseguró que este grupo está listo para conversar con el gobierno y solicitó al presidente Gustavo Petro consolidar la mesa de negociación.

De acuerdo con el abogado, el EGC ha propuesto una agenda seria, realista y propia para el desarrollo territorial, una que no puede ser ignorada por el Gobierno si realmente quiere lograr una paz duradera:

“Son muchos temas los que pueden hablarse en una agenda preliminar a la instalación de una mesa de diálogos o de negociación, como lo quieran llamar para que eso no cause tanto temor en la comunidad. El tema del de economía ilícita, el asunto el narcotráfico que no es tan pacífico en nuestro país y en el mundo, de la migración irregular o lo que los que llaman el paso de viajeros hacia Panamá, minería de oro, en fin, es un sinnúmero de economías que para la gente el común son llamadas ilícitas, pero que para las regiones donde ellos hacen presencia no son vistas así”.

Al contrario de las otras tres mesas de negociaciones instaladas —con la guerrilla del ELN, con las disidencias de las FARC del Estado Mayor Central (EMC) y la Segunda Marquetalia— el jurista indicó que el Clan del Golfo está dispuesto al sometimiento a la justicia en los términos permitidos, incluyendo la dejación de armas, “en el momento en que ya se firme un proceso de paz y una negociación, ya que no tendría ningún sentido hablar de paz si lo primero que se piensa es seguir con sus fusiles o con la trampa de guardar fusiles (...) Recuerden que la paz no es un derecho que tenga un gobierno o el Presidente de la República, la paz un derecho que tenemos todos los colombianos”.

Con relación al control que ejerce este grupo armado en la zona del tapón del Darién, que conecta a Colombia con Panamá, aclaró que no son ellos los que trafican a los migrantes, que en su mayoría son ciudadanos venezolanos,

“Por las fronteras donde ellos cruzan ese es control territorial de las guerrillas, no del Ejército Gaitanista. Cuando llegan al golfo de Urabá es que el ejército Gaitanes hace un control de esa población de viajeros, porque si no lo hacen van a ir donde aparecen las personas violadas, desaparecidas, los que atracan incluso han capturado ellos que lo que me han informado, gente con fusiles y grandas tratando de cruzar el Darién”.

Conviene recordar que, según la directora para las Américas de Human Right Watch, Juanita Goebertus, actualmente el Clan del Golfo controla enteramente el negocio de los barcos que salen de Necoclí y que salen de Turbo. Por este control este grupo recibe por cada migrante 125 dólares, “eso significa que, aproximadamente, al año, al ritmo que va la migración por el tapón del Darién el año pasado, el Clan del Golfo recibió 65 millones de dólares”.

Por último, el abogado Giraldo señaló que el Ejército Gaitanista de Colombia tenían más de 10.000 hombres en armas y hoy controla el 70% del territorio nacional.