¿Con qué frecuencia se debe cambiar agua de un gato?: Esto debe hacer si tiene más de uno

Uno de los factores claves para que un gato crezca sano y de forma proporcional a su edad es la alimentación e hidratación. En ese sentido, se recomienda que los felinos tomen entre 50 y 100 mililitros de agua de su peso corporal al día. Por poner un ejemplo, si el animal pesa 4 kilos, debe darle 200 a 400 de esta cantidad al día.

La medida de agua que tome también dependerá de su dieta: si el gato tiende a comer alimento en seco, tiene que complementar esta falta de líquido directamente, ya que, la mayoría de su hidratación la reciben por la comida.

Otros factores que influyen a que el felino consuma más o menos agua son qué tan activo es, pues un gato de interior tiende a moverse poco y, por lo tanto, necesitará una cantidad menor. Ahora, si es de salir y jugar, lo mejor es que adquiera unas condiciones para que el animal se pueda hidratar correctamente.

Dentro de ello, es importante que estas condiciones de hidratación contengan medidas para limpiar de forma frecuente el tazón del agua y cambiarlo. Le damos los detalles del tema.

¿Cuántas veces hay que cambiarle el agua a un gato?

Una vez al día, por lo menos. Esto varía si el gato es muy activo y constantemente va a tomar, pues, siendo así, es mejor cambiarla más seguido. Especialmente en climas cálidos, el agua condensada puede provocar enfermedades o virus estomacales.

No está de más decir que, cuando vea pelo, restos de comida o huela mal, se debe botar el agua y ponga una nueva. Una opción para mantener este líquido limpio con filtro es un dispensador que arroje la cantidad necesaria en el momento que el gato lo requiera. De igual manera, esto aplica si tiene varias mascotas en su casa.

¿Con qué frecuencia debo limpiar el cuenco de agua de mi gato?

Expertos en medicina veterinaria señalan que este procedimiento se tiene que hacer a diario. Lo recomendado es que no solo sea el tazón de agua, sino también los dispensadores y el cuenco de la comida. El proceso de lavado es con agua, jabón y un estropajo diferente al de lavar los platos.

Se recomienda el uso de vinagre y agua caliente para matar todas las posibles infecciones que puedan existir. Cuando se vaya a secar, es mejor usar papel desechable y no un trapo de cocina.

¿Qué pasa si no limpias el cuenco de agua de tu gato?

Se pueden crear bacterias que afectarían la salud del gato e, incluso, de cualquier animal y humano que tenga contacto con el tazón. A veces puede suceder que haya una especie de baba o película de materia desconocida, eso sería la manifestación de una bacteria que se produce a raíz de la humedad constante.

Por otro lado, se recomienda que los cuencos de agua y comida sean de acero inoxidable, ya que, materiales como el plástico son difíciles de desinfectar. También, es mejor lavarlo en un espacio diferente a lavaplatos y ponerle desinfectante a los espacios que tocó el platón.