Nuevo modelo de aseo en Bogotá ¿qué cambios esperar?
Más de 6 mil toneladas de basura al día llegan a este relleno, por lo que la Alcaldía de Galán busca que menos desechos lleguen a este lugar e impulsar la economía circular.
Bogotá
En la reunión que tuvieron el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán con el superintendente de Servicios Públicos Domiciliarios, Dagoberto Quiroga se acordó mejorar el manejo de residuos sólidos en el relleno sanitario Doña Juana en el nuevo sistema de aseo de la capital, ‘Basura Cero’.
Otro de los acuerdos de la reunión fue la visita de la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios y la UAESP al relleno Doña Juana, con el fin de observar el estado en el que se encuentra el vertedero de residuos más grande del país.
“De acuerdo con el concepto de los técnicos, no existe en este momento ningún riesgo y precisamente lo que tratamos es avanzar hacia la reducción de depósitos de residuos en ‘Basura Cero”, indicó el superintendente Quiroga.
En años anteriores, en Doña Juana se han presentado varios derrumbes e incendios, afectando las condiciones de vida de las personas que viven cerca al relleno y de los mismos trabajadores. El operador del relleno, el Centro de Gerencia de Residuos, desmiente que recientemente se hayan presentado derrumbes en Doña Juana.
El nuevo modelo de aseo
En 2026 se vencen los actuales contratos de recolección y transporte de residuos, por lo que la administración de Galán propone ‘Basura Cero’.
‘Basura Cero’ tiene como fin de disminuir el depósito final de residuos sólidos en rellenos sanitarios como el de Doña Juana, que generan lixiviados, gases de efecto invernadero y olores ofensivos, para llegar a una economía circular, en la que los residuos son aprovechados y reutilizados al máximo.
“Estamos comprometidos con la Superintendencia, con la Comisión de Regulación, con el Ministerio de Vivienda y lo que queremos es que Bogotá demuestre que sí se puede hacer una realidad, la economía circular, el concepto de basura cero y la transición energética”, aseguró la directora general de la UAESP, Consuelo Ordoñez.
Según la directora, el proceso de la economía circular comienza desde los hogares con la separación de basuras y, lo que no pueda ser recogido por los recicladores, llegue al relleno sanitario, pero que sean desechos mínimos
“Habrá muchas posibilidades de que intervengamos esas rutas de transporte para producir otros elementos, tratar y valorizar estos residuos en otros lugares y que puedan, ojalá, convertirse en materias primas y en valor agregado para los desechos, en lugar de venir a traerlos aquí necesariamente todos a Doña Juana”, explicó Ordoñez.
Sin embargo, ese proceso es largo por lo que la capital seguirá necesitando el relleno sanitario.
Doña Juana, una problemática ambiental y social
A pesar de que las condiciones ambientales han mejorado en Doña Juana, sigue siendo una fuente de contaminación, como cualquier otro relleno sanitario en el mundo, pero que afecta a los habitantes que viven alrededor (anteriormente los habitantes de Ciudad Bolívar demandaron al Distrito por los daños ocasionados).
Esto ha hecho que los habitantes se cuestionen la ubicación Doña Juana, que recibe en promedio más de 6 mil toneladas de basura al día.
“Sí vamos a necesitar mantener el relleno sanitario, siempre mejorando las condiciones ambientales, siempre realizando las inversiones necesarias para que la afectación de las comunidades aledañas sea la mínima posible. Siempre compensando a las comunidades de Mochuelo que han, en diversas épocas, sentido de una manera incorrecta los embates de una disposición ambientalmente inadecuada”, afirmó Ordoñez sobre la necesidad de un relleno sanitario en Bogotá.
Biogás
Las basuras y los lixiviados producen gas metano, que es altamente contaminante y lo que hace el relleno es convertirlo en dióxido de carbono, menos contaminante que el metano, pero que sigue contaminando considerablemente.
Es por eso que uno de los proyectos que se ha venido trabajando en el relleno desde 2016 es el tratamiento del gas metano para generar energía.
“Hacemos una quema controlada con un objetivo ambiental, que es evitar que ese gas metano vaya a la atmósfera. Utilizamos el gas metano como combustible que tiene una energía calórica y el objetivo es utilizarla y añadir otro producto para generar energía, que es el biogás”, explicó uno de los trabajadores de Biogás.
Por el momento, solo se genera 5% de biogás, que es equivalente a darle energía a más de 2.500 hogares. La meta es llegar al 100% que , según los trabajadores, alcanzaría para alimentar el alumbrado público de Bogotá o darle energía a más de 100 mil hogares.
Este ha sido una de las mejoras tecnológicas que ha implementado Doña Juana para evitar afectaciones a la población aledaña y especialmente la contaminación al río Tunjuelito.