Restaurante a oscuras, Dans Le Noir: la creativa forma de sensibilizar activando otros sentidos

En Caracol Sostenible estuvo Mayte Sutto, propietaria del restaurante Dans Le Noir. Sutto aclaró cómo nació la idea de consolidar un lugar en el que las personas pudieran entender la experiencia de no poder ver. Además, explicó que buscan promover la empatía por medio de una actividad rutinaria en donde quienes la experimenten conozcan las dificultades de tener una discapacidad.

Asimismo, la propietaria detalló que la meta principal es lograr mayor empatía e inclusión en el mundo. En ese sentido, enfatizó en la necesidad de crear entornos que permitan comprender cómo viven los otros, para así poder generar soluciones.

Dans Le Noir surgió hace varios años en Europa y cada día aumenta su presencia en más países. Por el momento, no han llegado a América, pero poco a poco se han dado a conocer. “El primer restaurante a oscuras abrió en París en 2004. De hecho justo, este año celebramos los 20 años del primer restaurante a oscuras y ya tenemos varios por el mundo”

Los lugares en los que las personas pueden vivir esta experiencia son Londres, San Petersburgo, Madrid, Toulouse, Marsella, Estrasburgo, Luxemburgo, Bélgica, Suiza y en Nueva Zelanda. Anteriormente, estaban en Barcelona, pero por el Covid tuvieron que cerrar, no obstante, esperan volver a abrir una sede en esa ciudad.

La propietaria explicó que detrás de esta cadena de restaurantes hay todo un equipo. “Yo hago parte del grupo Dans Le Noir con mi marido. La idea la tuvo Eduardo, que hoy es el presidente, y planeó todo junto a Gigi, el director general del grupo.”

Mayte Sutto explicó que Gigi ayudó a construir la idea, pues él es invidente. Además, mencionó que él trabajaba en una asociación de personas invidentes. Pero que la idea de un restaurante surgió luego de que Gigi junto a Eduardo hicieran cenas a oscuras para sensibilizar a sus familias y amigos. “Gigi y Eduardo decidieron abrir el primer restaurante a oscuras y con mi marido nos juntamos después”.

Sutto aclaró que en el restaurante trabajan personas invidentes y que ellos atienden a los comensales. A su vez, resaltó que la idea es promover la empatía por medio de una buena atención. Para esto, los propietarios consideran importante brindar un servicio cercano.

Así lo explicó Sutto: “Realmente, para llevar un restaurante como el que llevamos hay que ser cercanos. O sea, somos una familia y no podemos hacer el trabajo que hacemos sin pasión, sin ganas.”

Finalmente, resaltó que la meta inicial es educar y promover mayor conocimiento sobre lo que es vivir con una discapacidad. “Vamos más allá del dinero”

Adicionalmente, mencionó que en los restaurantes trabajan no solo chicos invidentes, sino que también “incorporamos a personas sordas. La idea es integrar a personas con discapacidad visual o auditiva en el mundo laboral. No lo vemos por la discapacidad, sino por las capacidades”.