Más de 100 indígenas de pueblos Emberá retornaron a su territorio en Risaralda

Pereira

Fueron varios meses los que estuvieron 190 familias Emberá, viviendo en condición de hacinamiento y con dificultades de salubridad en la capital del país, situación que, con el acompañamiento de la Unidad para las Víctimas, culminó con el retorno a sus resguardos ubicados en Risaralda y el Chocó.

Luis Eduardo Torres Ramírez, director para el Eje Cafetero de la Unidad para las Víctimas, relata el proceso realizado durante el retorno voluntario de estos indígenas.

“Funcionarios de la Unidad para las Víctimas llegaron hasta la vereda Ágüita de Pueblo Rico, Risaralda, en el transcurso de la jornada se entabló el diálogo con las directivas del centro educativo, con el fin de concertar el bodegaje y préstamo de instalaciones para ubicar cada uno de los enseres, kit de herramienta y hábitat que se entregarán a cada una de las familias retornadas. Así mismo se conversó con los integrantes de las guardias indígenas, tanto de la comunidad Emberá como Cimarrona para el descargue y cuidado de todos los elementos. Se descargaron un total de seis camiones provenientes de la capital del país, ocupados con enseres de las familias que estaban habitando en la Unidad de Protección Integral de La Rioja en Bogotá”, indicó el funcionario.

El recorrido por tierra a los territorios ubicados en Pueblo Rico, Risaralda y Bagadó en el Chocó tuvo una duración de alrededor de 14 horas, teniendo presente que, 100 indígenas de los 432 que realizaron el retorno, se quedaron en territorio risaraldense y los demás continuaron su recorrido de seis horas a lomo de mula, hasta el resguardo en el Alto de Andágueda en el departamento vecino.

Aclara además que, desde la Unidad de Víctimas, que el Gobierno Nacional harán seguimiento a los compromisos establecidos con las comunidades, para lograr la sostenibilidad del proceso de retorno, y que las familias se mantengan en los municipios de origen bajo condiciones óptimas.