El spray de los árbitros pone en jaque a la FIFA

Por: José Borda

El spray que se ha venido utilizando en los partidos del fútbol profesional de la mayorías de Ligas del mundo, que actualmente se está empleando en la Liga de Corea del Sur que reinició actividades y que de seguro reaparecerá en la Bundesliga, fue inventado por el periodista argentino de 55 años, Pablo César Silva, quien tiene una dilatada trayectoria en medios y comunicación estratégica.

Silva, que jugando un partido aficionado, quiso patear un tiro libre y sufrió el adelantamiento de la barrera y tras discutir acaloradamente con el juez volvió a su casa furioso, fue a quien le surgió la idea de crear una espuma en el césped que lograra la consistencia necesaria y al cabo de un minuto desapareciera, lo cual logró con ayuda de un bioquímico.

Pablo César se asoció con el brasileño Heine Allemagne, un empresario de Mina Gerais, en el año 2000 y fundaron empresas de comercio de este producto en los dos países. Una vez lograron el spray final, le presentaron su idea a la Asociación del Futbol Argentino, encabezada por el presidente de la época Julio Grondona, quien le dio el visto bueno e impulsó la idea.

Seguidamente, con los informes de la Conmebol sobre el éxito del aerosol en la Copa América 2011, el 3 de marzo de 2012 visitaron los países que conforman la International Board, la cual lo aprobó y este accesorio pasó a formar parte clave del fútbol.

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El aerosol se volvió una herramienta útil, pues se comprobó que su aplicación obligaba a los jugadores a respetar la distancia reglamentaria y por ende se convertían más goles. La utilización a través de todas las competencias de la FIFA, con el aval de Joseph Blatter, abrió el espacio, no solo para su debut mundialista en Brasil 2014, sino también su implementación en la Copa del Mundo de Rusia 2018, y posteriormente en la mayoría de las Ligas del Mundo.

Luego vino el escándalo del “FIFAGate” y se olvidaron tanto de la espuma como de sus inventores, quienes quedaron sin su reconocimiento moral y económico.

Allemagne y Silva contrataron al abogado Cristiano Zanin Martins para que los representara jurídicamente en esta causa y logró que el juez Ricardo Lafayette Campos reconociera las 44 patentes de la empresa, le prohibió al organismo rector del fútbol en el mundo el uso del aerosol y fijó una multa de 15 mil dólares por cada partido en el que sea utilizado.

Esa medida cautelar fue pronunciada en diciembre de 2017, no la cumplieron y está abierta en un juzgado de Río de Janeiro desde esta época.

Por estos días Allemagne y Silva están a la espera del fallo de primera instancia, ya que infringir la ley de patentes es considerado un delito criminal en Brasil. Una vez salga exigirán la indemnización económica que les corresponde y a su vez, Gianni Infantino, el representante legal de la FIFA, podría incluso ir prisión en caso de no llegar a un acuerdo. La guerra por el spray avanza y puede que muy pronto no solo sea de espuma.