En la elección de los árbitros FIFA de Colombia “no hay procesos, sólo rosca”

*Por José Borda, analista arbitral de Caracol Radio 

El tema de la elección de los árbitros internacionales en Colombia se ha vuelto un problema serio año tras año porque se elige a “los amigos de los directivos y los ahijados de los instructores de turno” para que representen al país, mas no a los mejor capacitados y de mayor rendimiento.

Para la temporada 2018 no hubo excepción y el listado de los jueces que representarán al país en partidos internacionales no hubo un proceso serio, sino que imperó en algunos casos la famosa “rosca”.

De los 7 árbitros centrales que quedaron inscritos ante FIFA, Wilmar Roldan les gana lejos en calidad, de hecho, es el único que dirige en torneos élite y lo hace muy bien; Andrés Rojas y Gustavo Murillo cumplen el proceso y vienen actuando frecuentemente, estos tres se salvan por su trabajo regular y es un gran acierto que permanezcan en el panel.

Sin embargo, Wilson Lamoroux no debería estar en el listado, el “inefable” constantemente mete las de andar y actúa mal en los partidos no sólo en la liga colombiana, sino en los torneos en los que participa por Sudamérica; pero claro, en este caso impera el tema al que hacemos referencia, Imer Machado lo protege en el ámbito nacional y Oscar Julián Ruíz, en el internacional.

Los nuevos árbitros que entrarán al panel FIFA a partir del 1 de enero de 2018 son: Nicolás Gallo, Mario Herrera y Carlos Betancur; es bueno que jóvenes árbitros ingresen a este proceso, no obstante, para lo hecho por Gallo en la liga colombiana en el 2017 no es justo que esté en el listado luego de haber tenido líos y malas actuaciones, ¿A qué directivo de la Fedefutbol quisieron complacer? Por su parte, Herrera aunque viene andando bien, tan solo cuenta con 40 partidos en su carrera que no le dan la experiencia suficiente para el arbitraje élite, y Betancur ha trabajado por conseguir su sitial dentro del panel.

De los jueces que retiraron Juan Pontón, Harold Perilla y Luis Sánchez, se puede afirmar que con el primero se hizo justicia pues anduvo mal y perdió todas las pruebas físicas en el año; mientras que con los otros hubo una gran infamia, pues eran árbitros regulares a los que les daban partidos complicados y siempre respondían ¿Qué proceso hubo con Perilla si tan sólo duró un año y lo sacaron?

Considero que lo que primó para retirar del panel FIFA a estos 2 silbatos fue el no haber estado de acuerdo con el sindicato de árbitros que quería montar Imer Machado en Colombia; agremiación que al final dejó botada, pero que le sirvió como peldaño para estar en el puesto que hoy ocupa y desde el cual se dedica a pasar cuenta de cobro a quienes no apoyaron su causa.