Despiden al técnico Néstor Otero del Atlético Huila
El técnico Néstor Otero no llegó al deportivo Cali, pero su intención de dirigir al equipo Vallecaucano le costó el puesto en el Atlético Huila, al determinar la Junta directiva del cuadro "opita" la salida del orientador.
El técnico Néstor Otero no llegó al deportivo Cali, pero su intención de dirigir al equipo Vallecaucano le costó el puesto en el Atlético Huila, al determinar la Junta directiva del cuadro "opita" la salida del orientador.
Otero, quien había dejado como única opción para salir del Huila su vinculación al fútbol extranjero, aceptó conversar con las directivas del conjunto verde para definir su posible vinculación alejándose del compromiso asumido con el presidente Jorge Fernando Perdomo.
Se conoció que por ausentarse de la practica matutina, el Huila decidió pasarle la carta de despido, que se puede interpretar como una falta de deslealtad al club.
En declaraciones a Caracol Radio, Otero dijo que siempre se supo por parte del presidente Perdomo , los tramites de los diálogos con el Cali, pero que de un momento a otro todo se rompio tanto en el Cali, como con el Altético Huila y que se veía que no querían contar con sus servicios en el equipo de Neiva.
El Huila encargó al asistente de Otero, Alberto Granados, para dirigir al equipo mientras se estudian las alternativas para el banco, que desde ya, cuenta con una baraja de candidatos encabezados por Javier Alvarez, Carlos Mario Hoyos y Guillermo "Teacher" Berrio.
Otero deja al conjunto opita con cinco puntos y en la posición 16 de la tabla del torneo Copa Mustan II -jugadas seis fechas- y con la satisfacción de haberlo llevado a su primera final profesional y conseguir el subcampeonato ante el Atlético Nacional.
Llegó en mayo de 2006 llegó a Neiva en reemplazo de Bernardo Redín a la dirección técnica del onceno huilense, tuvo la difícil tarea de salvar la categoría de la primera ˜A™ en el segundo semestre del mismo año.
Nestor Otero alistaba el martes maletas con el ánimo de viajar en las primeras horas del miércoles a Cali y reunirse con los directivos del conjunto azucarero, que ya había sido dirigido por él, pero una llamada de Aurelio Grimber lo detuvo en el aeropuerto.
Al regresar a la ciudad, Otero tampoco tenía puesto en el Huila, como quien dice: "sin el pan y sin el queso".