Rusia recuerda con dolor la matanza en la escuela de Beslán
Rusia recuerda hoy a las víctimas de la matanza en la escuela de Beslán, en Osetia del Norte, en el primer aniversario del mayor ataque terrorista jamás perpetrado en este país. "El 1 de septiembre en nuestro país siempre se ha recibido con ánimos festivos, pero creo que esta vez me entenderéis...", declaró el presidente ruso, Vladímir Putin, al inaugurar el año lectivo en la Universidad Agraria de Krasnodar, en el Cáucaso Norte.
Rusia recuerda hoy a las víctimas de la matanza en la escuela de Beslán, en Osetia del Norte, en el primer aniversario del mayor ataque terrorista jamás perpetrado en este país. "El 1 de septiembre en nuestro país siempre se ha recibido con ánimos festivos, pero creo que esta vez me entenderéis...", declaró el presidente ruso, Vladímir Putin, al inaugurar el año lectivo en la Universidad Agraria de Krasnodar, en el Cáucaso Norte. Putin destacó que millones de personas en Rusia y en el mundo recuerdan la "horrible tragedia ocurrida en Beslán", donde murieron 331 personas, 186 de ellas niños. "Guardemos silencio y recordemos a quienes murieron y sufrieron a manos de los terroristas", agregó el jefe del Kremlin. Una marea humana de miles de personas afluyó hoy a la escuela número uno de Beslán, asaltada por un comando terrorista chechén, hace exactamente un año, con 1.251 personas en su interior, entre estudiantes, profesores y padres de alumnos. Cientos de familiares de las víctimas de riguroso luto depositaron hoy flores, velas y juguetes en el gimnasio del centro escolar, actualmente en estado ruinoso, y de cuyos muros cuelgan las fotografías de los muertos. Miembros de la Cruz Roja atendieron a varias personas que se desmayaron, mientras la antigua directora de la escuela, Lidia Tsaliyeva, fue insultada por varios familiares que la culpan de no proteger a sus hijos. Mientras en el resto de Rusia el curso escolar comenzó hoy con un minuto de silencio, Osetia del Norte lo aplazó hasta el próximo lunes, ya que los próximos tres días serán de luto en esta república, limítrofe con Chechenia. El secuestro, que mantuvo en vilo a Rusia por espacio de 52 horas hasta la mañana del 3 de septiembre, concluyó con una confusa operación de rescate en la que 31 terroristas fueron aniquilados, la escuela ardió en llamas y el tejado del edificio se desplomó sobre los rehenes. "Tras doce meses de espera, aún no sabemos la verdad. Puede ser, que dentro de diez año sabremos lo que pasó realmente", declaró Anna Totrova, madre de uno de los escolares muertos en Beslán. Por orden de las autoridades, se abrieron tres comisiones de investigación, dos parlamentarias en Rusia y Osetia del Norte, y otra dirigida por la Fiscalía, que no han conseguido ni esclarecer las circunstancias del secuestro ni dirimir responsabilidades entre las autoridades y las fuerzas de seguridad. "Aunque nuestros hijos están muertos, lucharemos por conocer la verdad sobre Beslán. Si no se descubre la verdad, los atentados terroristas volverán a repetirse", dijo hoy Susanna Dudiyeva, presidenta del Comité de Madres de Beslán. Este comité emitió hoy una declaración en la que pidieron asilo político en cualquier país donde "se respeten los derechos humanos", según informó la emisora de radio "Eco" de Moscú. "Nosotros, padres y familiares de las víctimas del atentado terrorista, hemos perdido toda esperanza de que se investiguen de manera objetiva las causas de la tragedia y no queremos vivir en un país donde la vida humana no vale nada", dice la declaración. Cuatro madres de Beslán serán recibidas mañana por Putin en Moscú, ocasión que será aprovechada por éstas para decirle a quién consideran culpable de la muerte de sus hijos. "El es el garante de nuestra libertad y seguridad, por ello la responsabilidad recae, fundamentalmente, en el presidente. Las palabras no nos consolarán, sólo la acción", agregó Dudíyeva. Stanislav Kesáyev, jefe de la comisión de investigación del Parlamento noroseta dijo hoy que "las autoridades deben responder por su incapacidad. No se entiende que más de 160 rehenes murieran sepultados por el tejado de la escuela y nadie asuma la responsabilidad". El parlamentario puso en duda la versión oficial sobre las causas de la explosión que desembocó en la matanza, el número de secuestradores o la utilización de un tanque y lanzallamas por parte de las fuerzas de seguridad. El Tribunal Supremo noroseta juzga desde el 17 de mayo pasado a Nurpashá Kuláyev, el único superviviente del comando terrorista que asaltó la escuela, operación que se atribuyó el comandante de la guerrilla chechena, Shamil Basáyev. Kuláyev, de 24 años y oriundo de Chechenia, fue acusado de ocho cargos, entre ellos terrorismo, secuestro y asesinato, pero mantiene su inocencia.



