El Milán le gana 2-0 al PSV y se acerca a la final de la Champions

El Milán se ha dejado entreabiertas las puertas de la final con un triunfo en casa ante el PSV Eindhoven (2-0), con goles del ucraniano Andreij Shevchenko y del danés Jon Dhal Tomasson, que dejan las cosas muy en su favor ante el partido de vuelta en tierras holandesas.
Dos goles de diferencia que no vienen a marcar la diferencia esta noche entre uno y otro equipo. Y es que la teórica gran superioridad técnica del Milán en realidad no fue tal, pues el PSV se permitió tutear especialmente en la segunda mitad a su ilustre rival.
Pero para su pesar, y para fortuna milanista, al conjunto holandés le faltó esta noche un "asesino de área", un jugador capaz de cazar y convertir en gol los balones que por esa zona pasaron.
En cambio, el Milán tiene varios: empezando por el ucraniano Andreiy Shevchenko; un jugador de gran calidad y movimiento, de notables recursos técnicos y que no desaprovecha ocasión que se le presenta; y siguiendo por el menos elegante danés Tomasson, que siempre sabe aprovechar un balón suelto. Y esta noche lo volvió a evidenciar.
El partido resulto interesante y jugado a buen ritmo ya desde el pitido inicial. Y, sobre todo, vio a un Milán, que recuperó el defensa al holandés Jaap Stam y en centro del campo a Andrea Pirlo, que salió rabioso y que con una fuerte presión en medio campo se volcó inmediatamente sobre la meta visitante.
Así, ya en el tercer minuto, el meta brasileño Gomes se tuvo que emplear ante un intento de Shevchenko de superarle por alto, tras un excelente pase largo de Paolo Maldini. Diez minutos después, el portero visitante tuvo que intervenir nuevamente a un disparo del argentino Hernán Crespo, al que siguió tras el pertinente saque de esquina un remate alto de Stam en apetitosa posición.
El Milán jugaba con velocidad, robaba pronto el balón y buscaba con balones largos verticales los desmarques de su pareja atacante.
Pasados los primeros minutos de agobio, el PSV empezó a respirar y, con una mejor presencia de Wilfred Van Bommel y del veterano Phillip Cocu, buscó las espaldas de la defensa milanista con la velocidad de sus delanteros.
Fue el peruano Jefferson Farfán quien dio el primer aviso a la meta de Dida, y quien poco después se vio agraciado por un débil disparo del estadounidense Beasley en una rápida acción en la que el delantero del Psv hizo todo bien menos el remate final.
El conjunto holandés daba la cara, se mostraba bien trabajado en contención por el veterano técnico Guus Hiddink, cerrando bien las entradas por bandas de Cafú y Kaladze.
Pero apenas cumplida la media hora, el Milán volvió a atacar al rival con una fuerte presión y, además, comenzó a funcionar el brasileño Kaká. Dos disparos suyos estuvieron cerca del gol, pero lo evitó con dos buenas intervenciones su compatriota Gomes (m.30 y 34).
Al Milán se le veía cerca del gol. Y este llegó tras un medido pase central de Kaká sobre Shevchenko, quien se escapó de una adelantada defensa holandesa y se plantó ante Gomes, al que superó con su habitual maestría (m.42). Un 1-0 que hacía justicia a la mayor presencia milanista y llegaba en el momento psicológico de al borde del descanso.
La segunda mitad vio de inicio a un PSV distinto y no sólo por la entrada en centro del campo de Lucius en lugar del defensa Bouma, a a quien Shevchenko se le escapó como quiso, retrasando Cocu su posición hasta la zona central defensiva.
El PSV también había cambiado su actitud y se mostró más valiente; mientras que el Milán se presentaba en una falsa espera, pues intentaba aprovechar los balones perdidos por el rival para golpearle rápidamente al contragolpe con espacios más libres.
Pudo llegar la igualada del conjunto holandés, donde creció en juego el surcoreano Park, si sus jugadores hubieran estado más atinados en el remate final.
Y, sobre todo, pudo elevarse al marcador el segundo tanto milanista. Pero, primero, Hernán Crespo (m.53) estuvo poco entonado y, luego, Gomes (m.57)volvió a lucirse ante un remate de Shevchenko que parecía penetrar en la meta holandesa.
El partido dio paso a unos minutos de ida y vuelta, con nuevo peligro por banda sobre una meta milanista que se veía beneficiada por la falta de tino en el último toque por parte de los jugadores del PSV.
El técnico milanista, Carlo Ancelotti, intentó dar más cuadratura a su centro del campo con la entrada de Ambrosini por un Pirlo con poco oxígeno por la lesión muscular que le ha mantenido unas semanas de baja. Y, después, sacó a Serginho para ayudar en banda a un Kaladze que sufría con las entradas de Park.
El Milán parecía conformarse con el 1-0, pero, sobre todo, deseaba evitar un tanto holandés. El PSV pudo encontrarlo con un disparo de Van Bommel, pero fue demasiado centrado. Y, a continuación, tras jugada de Kaká, el Milán le castigó al aprovechar Tomasson un balón suelto (m.90).
Un duro correctivo para el PSV Eindhoven, pero que acerca al Milán a la que puede ser su décima final en la máxima competición continental.
2 - Milán: Dida; Cafú, Stam, Maldini, Kaladze; Gattuso, Pirlo (Ambrosini, m.72), Seedorf (Seedorf, m.80); Kaká; Shevchenko y Hernán Crespo (Tomasson, m.64).
0 - PSV Eindhoven: Gomes; Ooijer, Alex, Bouma (Lucius, m.46), Lee; Van Bommel, Vogel, Cocu; Beasley (Vennengoer of Hesselink, m.61), Farfan y Park.
Goles: 1-0. Min.42: Shevchenko; 2-0. Min.80: Tomasson.
Arbitro: Kyros Vassaras, de Grecia. Mostró cartulina amarilla a Seedorf (m.19), Gomes (m.29), Ooijer (m.67).
Incidencias: Ida de las semifinales de la Liga de Campeones de Europa, que se jugó en el estadio Giuseppe Meazza, de Milán, con la presencia de unos 80.000 espectadores, con la presencia de 7.000 holandeses, aproximadamente.