Boca otra vez finalista de Libertadores al vencer a River

BUENOS AIRES,.--- El club argentino Boca Juniors, en un dramático partido, pasó a la final de la Copa Libertadores de América al imponerse 5-4 por penales a su eterno rival River Plate, que empató el marcador global que estaba 0-1 al ganar 2-1 en su estadio Monumental. Boca, finalista por segunda vez consecutiva, enfrentará la próxima semana en Buenos Aires al colombiano Once Caldas, que eliminó el miércoles al Sao Paulo de Brasil. El árbitro argentino Héctor Baldassi expulsó en el complemento al mediocampista de Boca el colombiano Fabián Vargas por doble amarilla y al delantero Carlos Tevez con roja directa por festejar el gol del empate con un gesto ofensivo para los simpatizantes rivales. En River el delantero Rubens Sambueza, que ingresó en el complemento por el mediocampista Eduardo Coudet, fue expulsado por un presunto insulto contra un juez de línea. Los goles de River fueron convertidos por el mediocampista Luis González a los 50 minutos y el zaguero Cristian Nasuti a los 90+4. Boca, en casi la única vez que llegó al arco rival, anotó por intermedio del delantero Carlos Tevez a los 88 minutos tras un pase del juvenil atacante Franco Cangele, reemplazante del veterano mediocampista Diego Cagna. En los penales Boca impuso su experiencia y pasó de ronda con goles de Rolando Schiavi, Pablo Alvarez, Pablo Ledesma, Nicolás Burdisso y Javier Villarreal. Para River anotaron el chileno Marcelo Salas, Daniel Montenegro, Fernando Cavenaghi y Luis González. EL arquero de Boca Roberto Abbondanzieri desvió el remate de Maximiliano López. "Sabíamos que lo podíamos ganar", dijo feliz el defensor colombiano Luis Perea a periodistas después del encuentro. "River fue un equipo digno que jugó muy bien y los dos fuimos a buscar el resultado para no llegar a los penales, pero en la definición nosotros supimos imponer nuestra experiencia y lo demostramos", agregó. River, con la necesidad de revertir el 0-1 del partido de ida en el estadio la "Bombonera", salió a matar o morir, pero todo quedó en el intento. Boca, con el oficio de tantas finales disputadas con éxito en los últimos años, esperó a su rival en su propio campo y pocas veces inquietó a su rival en ataque. Si bien River dominó la primera parte casi nunca pudo vulnerar las dos líneas de cuatro propuestas por el entrenador Carlos Bianchi. A los 15 minutos River tuvo la primera posibilidad clara, después de un centro en el área el zaguero Horacio Ameli quien bajó la pelota de cabeza para la entrada del delantero Maximiliano López, pero su remate no tuvo dirección. Hasta los 35 minutos el juego se concentró en el mediocampo, donde batallaron, y se ganaron sendas amarillas, Javier Mascherano en River y el colombiano Fabián Vargas, en Boca, antes de su expulsión. En el complemento, River, buscando tener más el balón, hizo ingresar al delantero Rubens Sambueza en lugar del mediocampista Eduardo Coudet. Tras la expulsión de Vargas, a poco de iniciado el complemento, River encontró el camino al arco de Boca. González, en una jugada individual por derecha, dejó a dos rivales en el camino y con un remate fuerte y cruzado superó la estirada de Abbondanzieri. River siguió buscando pero sus ataques se diluyeron en la intrascendencia y pagó caro su falta de experiencia en la Copa después que Sambueza se hizo expulsar y salió lesionado el defensor Ricardo Rojas cuando el técnico Leonardo Astrada había agotado los tres cambios. Cangele, en la primera pelota que tocó al minuto de su ingreso por Cagna, envió un centro al corazón del área y Tevez remató alto y puso el 1-1. El árbitro Baldassi lo expulsó luego por festejar agitando sus brazos como si fuera una gallina, por considerar que el gesto era ofensivo hacia sus rivales, apodados despectivamente "gallinas". Cuando todo parecía definido en el partido, River se fue al ataque y logró la ventaja con un tiro libre de Cavenaghi que encontró la entrada del defensor Nasuti, quien tocó suave junto al segundo palo del arco de Abbondanzieri. En los penales, el equipo dirigido por Bianchi impuso su experiencia y llegó a la final por segunda vez consecutiva después de que Abbondanzieri contuvo el remate desde los 12 pases de Maxi López, el jugador que más le preocupaba a Boca.