Alud deja 11 desaparecidos y unos 1.500 turistas varados en Perú

LIMA.--- Deslizamientos de lodo y piedras arrasaron varias viviendas e interrumpieron --por segunda vez en dos semanas-- la línea del ferrocarril que lleva a la ciudadela inca de Machu Picchu en Perú dejando varados a unos 1.500 turistas, dijeron autoridades.
"Los huaycos (aludes) cayeron en la zona baja de Machu Picchu pueblo. Uno de ellos arrasó con seis viviendas y afectó otras 20. Extraoficialmente se habla de unas once personas desaparecidas, entre ellas toda una familia", dijo a Reuters el presidente de la región Cusco, Carlos Cuaresma.
El funcionario explicó que las intensas lluvias que cayeron en las últimas 24 horas sobre la localidad, hicieron que uno de los ríos cercanos se desbordara, provocando dos grandes deslizamientos que dejaron prácticamente incomunicada la zona.
"Uno de los huaycos cayó sobre la línea del tren y hemos tenido que suspender nuestros servicios hasta que culminen los trabajos de limpieza. Unos 1.500 turistas están varados en Machu Picchu y estamos evaluando la manera de evacuarlos", dijo Joanna Boyen de Perú Rail, empresa administradora de trenes.
Machu Picchu, construida entre los siglos XV y XVI en medio de las montañas de los Andes, recibe unos 2.000 turistas diarios en temporada alta y la gran mayoría utiliza el servicio de trenes en sus diversos turnos para llegar a la ciudadela.
El viaje en tren desde la ciudad de Cusco hacia Machu Picchu, a más de 2.700 metros sobre el nivel del mar, dura poco menos de cuatro horas y muestra al visitante imponentes paisajes.
Según palacio de gobierno, el presidente peruano, Alejandro Toledo --que se encontraba de manera circunstancial en la zona al servir de guía para la realización de un documental sobre Perú por la cadena estadounidense Discovery Channel-- dispuso el envío inmediato de ayuda para los damnificados.
"El presidente va a inspeccionar los trabajos de limpieza, remoción de escombros y de ayuda a los afectados in situ", dijo un portavoz de palacio.
Hace dos semanas un alud interrumpió la línea del ferrocarril a Machu Picchu y los 600 turistas que quedaron varados tuvieron que ser evacuados con helicópteros.