Oslo, perrito que murió envenenado en Ciudadela Colsubsidio de Bogotá
El animal murió luego de ingerir un alimento que se encontraba entre los arbustos de una zona residencial en el occidente de la ciudad.
Oslo, husky siberiano. / Suministrada
Durante este fin de semana se registró un triste hecho en la zona de Engativá, en Ciudadela Colsubsidio de Bogotá, luego de que un perro llamado Oslo falleciera tras ser envenenado con un alimento que se encontraba cerca de una zona pública y residencial.
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Oslo, de raza husky siberiano, tenía cerca de dos años vida. El animal se dispuso a salir a dar un paseo con sus dueños en el occidente de la ciudad, como es costumbre, pero todo terminó en una tragedia.
El perrito encontró un alimento en un arbusto al lado de una panadería junto al conjunto Los Pimientos, en esta zona de la capital. Al parecer, esta comida estaría siendo dejada en estos lugares con veneno para ratas.
"Nuestro Oslo falleció este 30 de abril envenenado, porque en el antejardín del primer apartamento de la rotonda, en el conjunto Los Pimientos, detrás de la panadería, están poniendo arroz con veneno para ratas. Los perritos, por este olor a comida, van para este lugar. El veneno es demasiado fuerte: al principio no da síntomas, pero a los 10 minutos los hace convulsionar y enloquecer del dolor. No hay manera de salvarlos", fue parte del mensaje publicado por Jasbleidy Melendez, dueña de la mascota.
Y agregó: "Nosotros llegamos muy rápido a la clínica, pero no funcionó. Estén muy atentos a sus mascotas, nosotros no logramos salvar a nuestro peludo".
Ante el hecho, por ahora, se desconoce si personas externas o de los diferentes comercios del lugar habrían sido los responsables de dejar este tipo de alimento allí.
Por otro lado, es importante tener en cuenta que esta practica no hace parte de personas especializadas en el tema, por lo que se deben evitar estas acciones, que generan un alto riesgo para animales y personas del lugar.
Por tal motivo, es importante que los residentes de esta zona tengan cuidado con sus mascotas, para así evitar más tragedias como la de Oslo, que lastimosamente no pudo recuperarse.
Envenenamiento de Oslo. / Archivo particular
