Agentes de Antinarcóticos y la DEA capturan a 9 personas en el Magdalena
Los operativos fueron realizados en zonas de El Retén, Aracataca, Fundación y Santa Marta.
Un contundente golpe a las economías ilegales de las mafias del narcotráfico propina la Dirección Antinarcóticos de la Policía y la Agencia Antidrogas, DEA en el departamento del Magdalena, al desarticular a una organización dedicada a la contaminación de cargas de banano con estupefaciente.
Los operativos que se realizaron en Santa Marta, El Retén, Fundación y Aracataca, dejó como resultado la captura de nueve personas, todas señaladas del delito de tráfico de estupefacientes.
"Una investigación realizada por unidades de la Dirección de Antinarcóticos con el apoyo de funcionarios de la Agencia Antidrogas de los Estados Unidos, fue fundamental para lograr la captura de estos sujetos; cada uno desempeñaba un rol importante dentro de la organización, entre ellos se destaca a Jaime Mendinueta alias el ‘Ingeniero o Santa’, líder y financiero de la organización, quien fiscalizaba el transporte de los cargamentos de drogas desde Santa Marta hasta Europa en la modalidad de contaminación a contenedores refrigerados", señaló el comunicado de la institución.
Así mismo, detalló que esta persona ya había sido capturada en el mes de enero de 2021 cuando se movilizaba en un vehículo con 158 kilos de cocaína y un arma de fuego.
Otro de los detenidos fue alias ‘José’, segundo al mando en la organización y era el "coordinador logístico y perfilador de fincas bananeras; contactaba a trabajadores de dichas fincas instrumentalizándolos en el ocultamiento de la droga, además coordinaba el transporte de los contendores que eran contaminados con las sustancias ilícitas, los cuales serían exportados a Europa".
La Policía reportó que una mujer, identificada como alias Yuli, era la intermediaria entre el Ingeniero y alias José; y se encargaba de realizar seguimiento a los cargamentos de cocaína desde su ejecución hasta su destino y mantenía informados a sus jefes de todas las actividades logísticas.
"Otro integrante de la estructura conocido como ‘Cachaco’ tenía el rol de transportista de los contenedores que salían vacíos del puerto de Santa Marta y que posteriormente eran contaminados con cocaína dentro del sistema de refrigeración, actividad que era realizada con el contenedor en movimiento a mínima velocidad para no alterar el monitoreo satelital GPS", indicó la institución.
Las investigaciones determinaron que, una vez contaminados "seguían su rumbo a la finca donde los recibían algunos trabajadores al servicio de la organización criminal, finalmente eran cargados con frutas (bananos), para hacer el retorno nuevamente al puerto de Santa Marta para ser exportados a Europa".
OTROS CAPTURADOS
La Dirección Antinarcóticos reveló que, otro integrante conocido como alias José 2 tenía la función de finiquitar y asegurar el éxito de la contaminación de los contenedores que ingresaban a la finca, "evitando que se realizara revisión de la carga, estaba al tanto de los procedimientos relacionados con la llegada, cargue y despacho de contenedores, evitando que fueran detectados o puestos en evidencia por las anomalías en los sellos, precintos de seguridad o en las láminas internas del sistema de refrigeración".
Así mismo, se desempeñaba como supervisor de empacadoras y firmas de los documentos de personal que intervienen en el cargue.
Los investigadores judiciales conocieron que, alias Ribón y Cuadros, eran los encargados de garantizar la contaminación a los contenedores, cuando llegaba el contendor a la finca, lo recibía y realizaba la apertura y el cargue de los primeros pallets de bananos para cubrir la parte interna del sistema de refrigeración evitando que otras personas pudieran darse cuenta o poner en evidencia lo realizado por la organización criminal.
Finalmente, alias Deibis vigilaba que los contenedores que ingresaban a la finca contaminados con sustancia estupefaciente (cocaína), no fueran detectados o fueran puestos en evidencia.
Por otros lado, alias José 3 era el que verificaba y subsanaba las anomalías que pudieran tener en los sellos o precintos de seguridad o en las láminas internas del sistema de refrigeración, toda vez que fueron violentados en el momento de realizar la contaminación con la sustancia ilícita.