2.400 metros de muralla fueron intervenidos para su conservación
Se suman a los 3.774 metros cuadrados intervenidos en los pasados cinco años
Cartagena de Indias
Con la refacción de la explanada del Baluarte de la Cruz, en el sector Santo Domingo del Centro Histórico de Cartagena, la Escuela Taller Cartagena de Indias (ETCAR), designada por el Ministerio de Cultura para la salvaguarda de las fortificaciones de Cartagena, inició los trabajos de mantenimiento y conservación de las murallas.
Las obras empezaron a principios de febrero y se extenderán por dos meses, aproximadamente, y abarcarán tramos entre los Baluartes de Santa Cruz y de Santo Domingo, así como el Baluarte de Santa Clara y otros puntos específicos en otros sectores de la muralla, con el objetivo de reparar desniveles y desgastes en su superficie.
El director general encargado de la ETCAR, Luis Ricardo Dunoyer González, dice que “con estos trabajos se prevé impactar alrededor de 2.400 metros cuadrados en reparación de superficies, que se suman a los aproximadamente 3.774 metros cuadrados intervenidos por la ETCAR en los pasados cinco años a cargo de las fortificaciones, con el fin de tapar grietas, levantar pavimentos deprimidos, oquedades, charcos, realizar resanes, y quitar sobresaltos para obtener una superficie pareja. De este modo, brindamos a cartageneros y visitantes, un recorrido seguro por las murallas de la ciudad”.
El director de obras de la ETCAR, Mario Zapateiro Altamiranda, explica que “las reparaciones se realizan en las superficies deprimidas, las cuales se nivelan para que haya un recorrido parejo, sin riesgo para las personas al caminar, tratando de salvar lo que más se pueda del pavimento existente”.
Adicionalmente, en los puntos donde las placas de la explanada se hayan bajado, se hace un levante, se calza y se pone en su sitio original. A su vez, donde haya más desgaste de la superficie, se realiza la refacción de solado, en la que se aplica concreto con las mismas características que hoy día tiene la muralla.
Cada metro cuadrado en la explanada tiene una atención específica, los trabajos de refacción de solado no se realizan de manera industrial y continua, como pavimentar una calle, hay que desmontar, renivelar, volver a aplicar y resanar.
Por su exposición permanente al sol, la explanada de los baluartes no debe verse rígida y lisa como una calle, la presentación estética de su textura debe ser la de un solado hecho en piedra de canto rodado pequeña.
Esta textura se logra con una mezcla de cal, arena y una pequeña porción de cemento blanco para acelerar el fraguado y dar rigidez al concreto, para evitar que la abrasión causada por el transeúnte genere desgaste sobre la muralla.